Las plazas bursátiles de Santiago y Nueva York volvieron a batir récords este jueves, en una ola de compras de acciones desde Norteamérica hasta el Cono Sur. La positiva revisión del PIB del segundo trimestre en Estados Unidos marcó la pauta para la bolsa neoyorquina y en la renta variable a nivel general.
En Chile, el S&P IPSA escaló 0,4% hasta los 8.920,99 puntos (preliminar). Es la primera vez que cierra sobre la marca de 8.900, y corresponde a su máximo histórico número 44 en lo que va del año. CAP (3,5%), Latam (2,6%) y Enel Américas (2,9%) vieron los mejores retornos del selectivo.
"El rally del IPSA no es solo expectativa electoral, sino la combinación de valorizaciones atractivas, flujos consistentes, una temporada de resultados amplia y positiva, el repunte del litio y un marco macro-político más favorable, que explican el buen momentum y desempeño superior al de sus pares globales en las últimas semanas", dijo a través de un comentario escrito el jefe de estrategia de Fynsa, Felipe de Solminihac.
Tal como Enel Américas detalló en la propuesta de recompra de acciones conocida a fines de julio -y que disparó sus acciones ese día-, la compañía informó este jueves que, entre otras definiciones, fijó en 4% el porcentaje máximo a adquirir y un premio de hasta 15% sobre un promedio de cotizaciones en bolsa. Banchile Inversiones estará a cargo de abrir la oferta de compra.
Por su parte, Salfacorp (3,5%) escaló a un nuevo máximo desde 2018 y transó más de 10 mil veces el volumen de un día normal, ante proyecciones de que volverá al IPSA en el próximo rebalanceo del índice.
"Nos parece razonable proyectar que el IPSA aún podría subir en torno a un 13% adicional. Cabe destacar que, incluso bajo este escenario más constructivo, la visión sigue siendo conservadora desde una perspectiva de valorización. Ese potencial de upside implicaría simplemente volver al múltiplo promedio de los últimos 10 años, un horizonte que consideramos apropiado porque incorpora tanto los cinco años previos al estallido social como los cinco posteriores, reflejando un marco balanceado", planteó de Solminihac.
Los índices bursátiles de Latinoamérica igualmente subieron, especialmente el Bovespa (1,5%) de Sao Paulo, seguido por el argentino Merval (1,2%) y el mexicano IPC (0,9%).
En Wall Street, el Nasdaq avanzó 0,5%, el S&P 500 ganó 0,3% y el Dow Jones subió 0,2%. Con este resultado, el S&P 500 superó los 6.500 puntos y logró su vigésimo máximo histórico de 2025. También el Dow logró marcar un techo.
"El ánimo del mercado estadounidense se vio impulsado por una revisión al alza del PIB del segundo trimestre, que mostró una expansión de 3,3% en la economía", escribió la analista sénior de mercados de City Index, Fiona Cincotta.
La revisión superó en dos décimas las estimaciones de consenso, y obedeció principalmente al componente de inversión en activos fijos no residenciales. Los componentes de precios del PIB, incluyendo el deflactor subyacente -que la Reserva Federal mira de cerca- permanecieron intactos, tal como se tenía previsto.
Cincotta destacó que estas cifras, si bien fueron más sólidas de lo esperado, no alteraron la expectativa de un recorte de tasas de la Fed en septiembre. "Ahora la atención se centrará en los índices del gasto en consumo personal subyacente de EEUU, agendados para mañana", señaló.
Mientras tanto, las acciones de Nvidia (-0,8%) cayeron, ya que si bien publicó sólidos resultados y se aliviaron los temores sobre el comercio de Inteligencia Artificial, hay preocupaciones sobre su negocio en China y la caída en sus ingresos por data centers.
Cruzando el Atlántico, el continental Euro Stoxx 50 cerró plano, mientras que el FTSE 100 de Londres disminuyó 0,4%. En Asia, el CSI 300 de China continental destacó con un repunte de 1,8%. Pero el hongkonés Hang Seng siguió en baja, con pérdidas de 0,8%. La bolsa de Tokio estuvo positiva, con un alza de 0,7% por parte del Nikkei.