El dólar caía con fuerza este viernes, ya que el esperado informe de nóminas no agrícolas de agosto resultó ser aún más débil de lo que el mercado tenía en mente, y con ello se expanden las apuestas a nuevos recortes de tasas en Estados Unidos tan pronto como sea posible.
La paridad local bajaba $ 9,7 a mínimos del día en $ 963,7 durante la mañana en las pantallas de Bloomberg, y así pone a prueba un nivel que es considerado un soporte técnico relevante entre los operadores.
El dollar index retrocedía 0,7% a 97,6 puntos y los rendimientos del Tesoro a dos años, sensibles a lo que se espera de la Reserva Federal, se hundían 10,7 puntos base (pb) a 3,48%, su menor nivel desde septiembre de 2022. Por su parte, el cobre Comex subía 0,5% a US$ 4,58 la libra.
"Tenemos un cobre al alza y en general están aliénadose los planetas para que el peso chileno recupere parte del terreno perdido", dijo a DF el economista jefe de EuroAmerica, Felipe Alarcón. "Es natural que el tipo de cambio se detenga en estos niveles técnicos, sobre todo antes de un fin de semana", añadió.
Las nuevas nóminas fueron apenas 22 mil, frente a las 75 mil de las estimaciones de consenso, mientras que la tasa de desempleo subió a 4,3% -la mayor desde 2021- en línea con los pronósticos, informó esta mañana el Departamento del Trabajo de EEUU.
Para el mercado, ya es un hecho que en la reunión del 16 y 17 de septiembre la Fed se inclinará por recortar su tipo oficial. Más aún, los operadores descuentan una probabilidad de casi 20% de que el banco central elija de inmediato una reducción de 50 pb, según las tasas implícitas en el mercado de futuros.
Alarcón sostuvo que un movimiento de esta magnitud estará sujeto a las novedades del lunes, cuando la Oficina de Estadísticas Laborales publique su revisión anual de la creación de empleo en la potencia norteamericana. "El año pasado esta revisión fue tan negativa que provocó el recorte de 50 pb antes de las elecciones. Varios analistas señalan que este año podría venir una revisión muy grande a la baja", destacó el economista.
Las cifras de hoy también dieron cuenta de una desaceleración de los salarios por hora promedio, lo que facilita el trabajo del banco central. Si bien estos subieron 0,3% mes a mes, como se esperaba, la tasa de variación anual cayó dos décimas a 3,7%, menos que el 3,8% estimado.
Previamente esta semana, las ofertas de empleo de julio y el informe ADP de nóminas privadas de agosto ya habían dado señales de que la debilidad del mercado laboral está desafiando los cálculos de los economistas.