El fútbol es un negocio a gran escala en el que todas las partes están involucradas y se ven favorecidas. El ítem con el que menos simpatiza el hincha común es el que más creció en los últimos años: los árbitros.
Siendo una parte escencial del juego, los hombres que imparten justicia en los campos de juego vieron crecen su productividad significativamente en los últimos años, con el claro respaldo de la FIFA. La exigencia profesional y las presiones han provocado grandes cambios en sus ingresos.
Miguel Scime, exárbitro y exdirector de árbitros en AFA, reveló en una nota para Infobae cuánto cobran los jueces de fútbol argentinos de Primera División hoy en día.
Un árbitro de estatus internacional en el país logra un ingreso básico de 482.000 pesos. A ese monto se le agrega un plus por encuentro dirigido de 79.000 pesos. Si en cambio acude a la cabina del VAR, esa cifra es de 67.150 pesos.
En consecuencia, el ingreso mensual promedio en estos casos asciende a 782.000 pesos brutos, a los que hay que descontarles las cargas sociales e impuestos.
Los jueces de línea/asistentes internacionales regulan una cifra de aproximadamente el 50 por ciento del árbitro principal.
A su vez, cabe destacar que cuando son llamados por Conmebol o FIFA para dirigir en un certamen internacional logran un incremento importante, dado que los pagos son en moneda extranjera y han sufrido importantes incrementos en los últimos años.
Además de ello, Scime aclara que la gran mayoría de los árbitros, a pesar que ya no es obligatorio o un necesidad, complementa su actividad deportiva con emprendimientos personales; e inclusive otros son empleados estatales o municipales.