Un control realizado por agentes especializados de la Dirección General de Aduanas resultó en la clausura de una óptica ubicada en el exclusivo barrio de Puerto Madero.

El comercio exhibía anteojos con inscripciones de marcas como Dolce & Gabbana, Versace, Louis Vuitton, Dior, Gucci y Prada, entre otras, pero llamativamente sólo los vendía al contado, en efectivo. El resto de los lentes se comercializaba en forma convencional.

Al hacerse presentes en la óptica -en los términos del artículo 123 del Código Aduanero- los inspectores del organismo comprobaron que, en efecto, los anteojos de sol de las mencionadas marcas de alta gama carecían de las debidas estampillas fiscales aduaneras, así como de la documentación que avalara su legítimo ingreso al territorio nacional. Ello los llevó a presumir que la mercadería había ingresado al país de manera irregular -razón por la cual incluso la autenticidad de los lentes podría estar en cuestión.

Por otra parte, cabe recordar que, además de accesorios de moda, los anteojos son productos relacionados con la salud ocular: dado que además carecían de la certificación de la ANMAT, no puede garantizarse que su uso fuera seguro.

Al respecto, Norberto Fermani, presidente de la Cámara Argentina de Industrias Ópticas (CADIOA), afirmó: “Este tipo de acciones son importantes porque, además de cuidar la salud de la población, protegen a los comerciantes que fabrican e importan productos ópticos en cumplimiento de las normas. Celebramos que se tomen medidas contra la competencia desleal”.

Así, por todo lo expuesto, en el marco de los artículos 986 y 987 de la Ley 22.415, los agentes de la Aduana resolvieron el secuestro de los lentes en cuestión, sumado a la clausura del comercio, en los términos del artículo 989 de la citada normativa. Se estima que el valor de la mercadería en infracción secuestrada asciende a u$s70.000.