Las cuentas de Google poseen un espacio gratuito de 15GB el cual se reparte entre todas las aplicaciones del paquete de la plataforma. Y cuando ese espacio se llena, solo quedan dos opciones: intentar liberar espacio o, directamente, comprar más espacio. Y a veces ninguna de las dos son posibles.

Sin embargo, aquí te dejaremos otra alternativa, que pasa por crear una nueva cuenta y redirigir correos a la principal. De esta manera, generando efecto práctico seguirás usando tu cuenta de correo tradicional, solo que los correos que se enviarán a ella le llegarán a la cuenta nueva sin que nadie tenga motivos para saber su dirección real.

Algo hay que reconocer y aclarar: ésta puede ser una buena medida temporal mientras reacomodas tu espacio. Y además de que te lleguen los correos que te escriban a tu cuenta llena a la nueva que creas, también podés hacer que los que escribas o vayas a responder desde la nueva cuenta se envíen como si fueran de la anterior cuenta antigua. Así, nadie se dará cuenta de que estás usando una cuenta secundaria.

Una vez hecho todo esto, ya habrás terminado. Las otras personas que escriban correos a tu cuenta antigua recibirán las respuestas desde ella, pero vos las estarás escribiendo desde un nuevo correo secundario en el que tienes otros 15GB de almacenamiento gratis.