Después de meses de investigación y negociación, Microsoft, dueña de Xbox, recibió un duro revés en su intento de comprar al gigante de los videojuegos Activision Blizzard. La Autoridad sobre Competencias y Mercados del Reino Unido (CMA) bloqueó la compra por u$s68,7 mil millones, sentando un duro precedente para las decisiones de otras agencias reguladoras cómo la Comisión de Valores de Estados Unidos.
La CMA analizó más de 3 millones de documentos y más de 2100 emails para concluir que el trato podría "alterar el futuro del mercado de videojuegos en la nube que crece rapidamente, causando que se reduzca la innovación y las opciones para los gamers del Reino Unido en los próximos años". "Microsoft tiene una posición fuerte en estos servicios y la evidencia disponible muestra que podría encontrar beneficioso convertir a los juegos de Activision en exclusivos de su servicio de juego en la nube", expresó el ente regulador en referencia a Xbox Cloud Gaming.
En pos de responder a estas preocupaciones, Microsoft cerró tratos con otros servicios de videojuegos en nube como Boosteroid, Ubitus y Nvidia. Estos acuerdos les permiten tener juegos de Xbox PC en sus servicios por al menos 10 años, incluyendo Call of Duty y otros juegos de Activision Blizzard si se concretase la compra.
Para el ente regulador estos tratos eran insuficientes en algunos aspectos: No cubrían diferentes modelos de negocio para servicios de videojuegos en la nube; no incluían proovedores que quisieran ofrecer versiones de juegos para sistemas operativos diferentes a Windows y estandarizarían los términos y condiciones de disponibilidad de los juegos, en oposición a determinarse por dinamísmo y creatividad de la competencia en el mercado, cómo sucedería en ausencia de la adquisición.
Sorprendentemente, los motivos para rechazar la compra no vinieron por las quejas presentadas por la competencia, PlayStation, sobre la posibilidad de que Call of Duty deje de estar en su plataforma, algó que la CMA opinó que sería costoso para Xbox. "Microsoft fue constructivo con nosotros a la hora de presentar respuestas y estamos agradecidos por eso, pero sus propuestas no fueron efectivas para aliviar nuestras preocupaciones y sentimos que la competencia recibiría regulaciones poco efectivas para un mercado nuevo y dinámico", dijo Martin Coleman, el jefe del panel de expertos que realizó la investigación.
"Estamos comprometidos con la compra y vamos a apelar", le expresó el presidente de Microsoft Brad Smith a The Verge y agregó: "La decisión de la CMA rechaza un camino pragmático para responder a las preocupaciones de la competencia y desfavorece a la innovación tecnológica y la inversión en el Reino Unido".
Smith destaco que ya firmaron "contratos para que los populares videojuegos de Activision Blizzard estén disponibles en 150 millones de dispositivos más" y están comprometidos "ha reforzar estos acuerdos". "Estamos especialmente decepcionados que después de tantas deliberaciones, esta decisión parece reflejar un entendimiento fallido del mercado y de cómo la tecnología en la nube realmente funciona", cerró el ejecutivo
La preocupación de Microsoft ahora es que las agencias reguladoas de Estados Unidos y Europa puedan seguir un camino similar. El verdadero problema sería la Comisión de Valores de Estados Unidos (FDA) mientras que, a principio de marzo, medios económicos dieron a conocer que la Unión Europea estaría cerca de aprobar la compra en estos días.
Desde el anuncio de la compra en enero de 2022, Microsoft se concentró en responder a las preocupaciones de estas agencias, en especial las que fueron entregadas por su competidor, PlayStation de Sony, sobre la posibilidad de que Xbox vuelva a la franquicia Call of Duty un exclusivo de sus consolas. En ese sentido, la compañía con base en Estados Unidos cerró tratos con Nintendo y Nvidia para que Call of Duty esté a sus servicios y consolas por al menos 10 años.
PlayStation no aceptó este trato y dijo que "Microsoft no ha demostrado un compromiso real para llegar a un acuerdo negociado".
Aunque la Unión Europea apruebe la compra, Microsoft deberá enfrentarse a la FDA en las cortes federales de Estados Unidos, ya que el ente regulador presentó una demanda para bloquear la compra.