Luis Zaracho, el jefe de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes fue detenido este jueves, acusado de “encubrimiento” en el marco de la causa por el homicidio de Lautaro Morello y la desaparición de Lucas Escalante, ocurridos en diciembre pasado en el partido bonaerense de Florencio Varela.
El comisario mayor se transformó en el cuarto detenido y en el tercero de alto rango que tiene la causa, y que, a pedido del fiscal de Berazategui, Daniel Ichazo, fue apresado por efectivos de la División Homicidios de la Policía Federal. La detención del jefe policial se concretó un día después de que fuera mencionado por el comisario inspector Sergio Argañaraz en su declaración indagatoria ante el fiscal.
Argarañaz, a través de su defensa, solicitó la excarcelación. El pedido fue denegado por el Juzgado de Garantías N°5 del departamento judicial de Quilmes, a cargo del juez Agüero. En las últimas horas, el jefe policial corrido de la Bonaerense apeló la resolución.
Zaracho y Argañaraz no son los únicos policías implicados. Ramiro Yair Forchinito fue acusado de falso testimonio porque le entregó a la Justicia un celular que no le pertenecía en vez del suyo. El juez de Garantías Diego Agüero resolvió liberarlo bajo caución juratoria la semana pasada tras varios días preso.
La noche del 9 de diciembre de 2023, ambos jóvenes salieron para festejar el triunfo de la Selección argentina ante Holanda por los cuartos de final del Mundial de Qatar. Escalante pasó a buscar a su amigo a bordo de un auto, que al día siguiente fue encontrado incendiado.
El cuerpo semi calcinado de Morello fue hallado seis días más tarde a la vera de la autopista Buen Ayre, en Guernica, partido de Presidente Perón. 48 horas después, Cristian y Francisco Centurión fueron detenidos como coautores del delito de homicidio calificado por ensañamiento y alevosía. Ambos son sobrinos del comisario mayor Francisco Centurión, fuertemente sospechado en el caso. Su quinta en Florencio Varela fue allanada.