Cuando parecía que más allá de los tironeos quedaba sellada la unidad de Juntos por el Cambio en Tierra del Fuego y en Salta, las tensiones internas del PRO entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta hicieron retroceder los acuerdos forzados del cierre de alianza con impugnaciones de apoderados; y se esperaba al cierre de esta edición la definición de la Justicia Electoral sobre la potencial ruptura del sello amarillo.
Dos novelas de idas y vueltas que podrían determinar que ambos distritos se sumen al quiebre de JxC que ya se oficializó para los comicios del 16 de abril en Neuquén y Río Negro. Y donde las presiones de dirigentes locales, que entienden que las sociedades nacionales no se espejan en sus provincias, terminen por imponerse. En esa lógica, la principal batalla se da en Mendoza, donde Omar De Marchi, líder del PRO local y referenciado en Larreta, analiza enfrentar al radicalAlfredo Cornejo directamente en generales y no en las PASO, como quiso imponer -también sin éxito- Patricia Bullrich.
El caso salteño fue un sinfín de marchas y contramarchas que continuaron ayer. En el plazo de cierre de frentes, Juntos por el Cambio llegó a inscribirse con la UCR y el PRO, pero luego el partido creado por Mauricio Macri llamó a desconocer la sociedad, ya que la UCR habilitó también a unirse al partido Frente Plural cuyo referente, Matías Posadas, está ligado al gobernador Gustavo Sáenz.
Pero una jugada solitaria de Patricia Bullrich logró cerrar un acuerdo con el radicalismo, pese a la resistencia de dirigentes locales. Mientras un interventor de Bullrich, Alejandro Ávila Gallo, firmaba la adhesión a la alianza, anteanoche un segundo interventor afín a Rodríguez Larreta, Antonio Demarco, impugnaba el frente, la firma y la potestad de utilizar el nombre Juntos por el Cambio en la provincia.
“En ese momento Bullrich decidió destituir al interventor Demarco, lo que llevó a una reunión de urgencia de toda la plana del PRO en donde se debatió si realmente Bullrich podía tomar una decisión así”, explicó a Ámbito un referente del partido en Salta. En el Tribunal Electoral también quedaron mareados. “Lo último que recibimos fue una presentación donde comunicaban que había cesado en su intervención. Desde el orden nacional se le revocó ese poder que tenía”, aseveró Pablo Finquelstein, secretario del Tribunal Electoral en diálogo con FM Profesional, quien dijo que la situación deberá resolverla la Justicia Federal.
En el zoom del Consejo Nacional del PRO le torcieron el brazo a Bullrich: desconocieron la acción por unilateral y se le dio aval al interventor destituido. Ayer por la mañana presentó la documentación en el Tribunal Electoral para que su pedido anterior fuera legitimado.
A la expectativa queda el radical Miguel Nanni, quien era el candidato a gobernador del acuerdo cerrado entre Bullirch Martín Lousteau. El PRO, en ese juego, se quedaba con el lugar de vice para Inés Liendo y la intendencia capitalina para Posadas.
Desde Salta, llaman a romper la unidad, y ayer lanzaron un comunicado -y junta de firmas- que indica: “Sorpresivamente, se cuela ahora por la ventana el Frente Plural, cuya cara más visible (y tal vez único militante) es el actual funcionario -designado por el gobernador Sáenz en el Consejo Económico y Social- Matías Posadas. Exradical, exurtubeicista, no del todo exsaencista, quién sabe si exkirchnerista, Posadas representa todo lo contrario de lo que Juntos por el Cambio aspira a representar”. Y concluye en que “su forzada inclusión sugiere intereses y acuerdos ocultos”.
De hecho, Sáenz tiene buen vínculo con todos los sectores del arco político, que incluso participan de su gobierno. Por caso, el mandatario presentó tres alianzas que tendrán terminal en su candidatura a la reelección, una forma de contener a las distintas expresiones de su heterogéneo provincialismo.
Los tiempos aprietan para la Justicia: el sábado deben definirse las candidaturas y anoche se aguardaban definiciones.
El Zoom de los dirigentes amarillos también tocó el caso fueguino, con hechos similares: la alianza se inscribió a la fuerza con la UCR y el PRO adentro, pese a la resistencia de la dirigencia local. Incluso, el principal referente del partido en Tierra del Fuego, el diputado nacional Héctor Stefani, había anunciado que presentaría su candidatura a gobernador por fuera de la alianza.
Y acá vuelven a actuar los interventores: mientras quien inscribió al PRO fue Federico Angelini, que es quien está validado para la Justicia Electoral, otro interventor, Mariano Gallegos, anotó al PRO como “Creer en Tierra del Fuego”, lejos de la UCR.
En hechos similares a los de Salta, el Consejo del partido avaló anteanoche a Gallegos, invalidando así las acciones de Angelini, aunque ahora también deberá definir la Justicia.
“El Consejo Directivo se convocó por la emergencia de Salta y Tierra del Fuego para ratificar sus resignaciones, sus competencias y revocar las decisiones de Presidencia”, dijo a Radio Nacional Ushuaia la apoderada del PRO, María Eugenia Chiarvetto. Según consignó el medio local Sur54, la apoderada expresó que “todas las acciones que haya otorgado Angelini son nulas, porque no actuaba bajo competencia”. “Por lo tanto, hoy se presentaron las actas a los juzgados para que proclamen a los candidatos que oficializó el partido. “El PRO no puede estar incorporado en Juntos por el Cambio bajo ningún punto de vista”, agregó y ratificó la fórmula Stefani-Paulino Rossi para enfrentar al gobernador Gustavo Melella, quien buscará su reelección en alianza con los tres intendentes de la provincia, que también irán al 14 de mayo por la renovación de sus cargos.