El presidente Alberto Fernández llegó este martes a las 10.20 al Palacio de Itamaraty, la sede de la Cancillería brasileña, para participar de la cumbre de países sudamericanos convocada por el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.
Fernández está acompañado por el canciller Santiago Cafiero y ofrecerá un discurso en la sesión plenaria de la mañana, para luego mantener por la tarde conversaciones personales con otros mandatarios presentes en la cumbre.
La cumbre de este martes promoverá un "diálogo franco" entre todos los presidentes para identificar denominadores comunes, discutir perspectivas para la región y reactivar la agenda de la cooperación sudamericana, de acuerdo a lo expresado en un comunicado por la cancillería brasileña.
Tras la cumbre está prevista una cena, que será brindada en el Palacio de la Alvorada, en honor a los participantes.
Además de Fernández y Lula, participan del encuentro los presidentes Luis Arce (Bolivia), Gabriel Boric (Chile), Gustavo Petro (Colombia), Guillermo Lasso (Ecuador), Irfaan Ali (Guyana), Mario Abdo Benítez (Paraguay), Chan Santokhi (Surinam), Luís Lacalle Pou (Uruguay) y Nicolás Maduro (Venezuela).
La actual presidenta de Perú, Dina Boluarte, impedida constitucionalmente de asistir a la cumbre, está representada por el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola.
La cumbre fue convocada por Lula luego de que Brasil decidiera volver a sumarse a la Unión Sudamericana de Naciones (Unasur) y como parte de los esfuerzos diplomáticos por recuperar la integración regional que se construyó en la primera década de este siglo.
Fernández subió la tradicional escalera del edificio modernista de la cancillería brasileña acompañado por Cafiero y el ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira.
La ciudad de Brasilia se encuentra este martes bajo un amplio operativo de seguridad para recibir a los 11 mandatarios y al representante peruano.
El primer presidente en arribar fue el venezolano Nicolás Maduro, quien ayer realizó una visita de Estado a Brasil, la primera después de ocho años y luego de haber sido prohibido de ingresar al país por el Gobierno del expresidente Jair Bolsonaro.
Tras la bilateral con Maduro, Lula defendió la unión sudamericana como un "bloque" para superar "graves problemas uqe tienen más de 500 años".
"Si estamos juntos, tenemos un mercado de 450 millones de personas, tenemos fuerza en el proceso de negociación y por eso es importante esta cumbre", aseguró Lula.
Al término del encuentro en la capital brasileña, Fernández viajará a Yacuiba, Bolivia, donde el jueves inaugurará, junto a su colega boliviano Luis Arce, el primer proyecto de conexión eléctrica entre ambos países. Las partes consideran este evento de suma importancia, orque hasta ahora Argentina y Bolivia solo tenían en común las conexiones de suministro de gas.