Medio siglo de militancia impulsada por su convicción: así se podría resumir un poco de la faceta más conocida de Nora Cortiñas, una de las activistas de derechos humanos más respetadas de la Argentina. En vísperas de las actividades conmemorativas por el Día de la Memoria, y luego de participar del III Foro Mundial de Derechos Humanos, analizó los desafíos que tiene el país en el 40° aniversario de su democracia.
“Democracia verdadera hay cuando en el país no hay hambre y se respetan todos los derechos humanos: el derecho al trabajo, a la libertad de expresión y al libre pensamiento para decir qué se quiere y qué no se quiere de las políticas del gobierno”, sostuvo Nora Cortiñas y consideró que “falta mucho para festejar la democracia que queremos”.
Periodista (P.): En este año electoral hay un discurso muy presente en torno al negacionismo, que seguramente este 24 de marzo se vuelva a escuchar. También existe un sector que no hace manifestaciones públicas cuando un nieto recupera su identidad. ¿Qué pensás sobre esto a 40 años de la recuperación de la democracia?
Nora Cortiñas (N.C.): Ahora en este país hay mucho fachismo. El negacionismo es fachismo, totalmente. Yo a esas voces no las escucho porque son detractoras de la democracia y el respeto de todos los derechos humanos. Pienso que todavía hay muchos fachistas que tienen que reflexionar lo que están haciendo.
P.: En tus 93 años hay muchas décadas de lucha. ¿Se puede considerar que es una vida bien vivida?
N.C.: Parecería que sí, pero también hubo mucho sufrimiento, porque incluyó la pérdida de un hijo y de 30.000 hijos e hijas en esos años. También guardo una grave preocupación porque todavía falta hacer justicia y que los jóvenes que fueron apropiados recuperen su verdadera identidad. Fue una represión terrible usando esta metodología de la desaparición forzada de personas, así que tenemos que seguir buscando toda la verdad y la justicia. No tiene que haber impunidad en nuestro país. Tenemos que seguir luchando, más allá de los 47 años que pasaron de cada jueves que las Madres estamos en la Plaza de Mayo.
P.: De cara al futuro, ¿qué desafíos tienen las políticas de Memoria, Verdad y Justicia?
N.C.: La Memoria, Verdad y Justicia tiene que ver también con la situación del manejo económico del país. Con hambre y miseria, no hay democracia. Yo espero con expectativa que cambie la política económica para gobernar para el pueblo y con el pueblo, respetando todos los derechos humanos.
La referente de Madres de Plaza de Mayo - Línea Fundadora, que fue declarada visitante ilustre el pasado fin de semana en la localidad de Esquel y se encontró con Facundo Jones Huala en la cárcel donde transita su condena, también apuntó que una de las demandas de la democracia es el reclamo contra la detención de cuatro mujeres mapuches en el marco del conflicto territorial en Villa Mascardi. “Les usurparon sus tierras, les destrozaron todas las casas que tenían y hasta el día de hoy están acusadas ellas mismas de usurpadoras. Además tuvieron muertos en manos de las fuerzas policiales”, consideró.
