"El sanisidrense se dio cuenta de que hay ciertas personas que no encarnan el cambio en nuestro distrito. Nosotros somos la verdadera alternativa", había dicho Catalina Riganti en una entrevista a Ámbito en el 2017, año en que asumió como concejal de San Isidro. Seis años después, busca disputarle la intendente a Gustavo Posse, referente del radicalismo bonaerense y jefe comunal hace 14 años.

Gustavo Posse es uno de los intendentes con mayor cantidad de gestiones ininterrumpidas de todo el país. Cuando asumió en el Municipio de San Isidro, los quintillizos Riganti tenían siete años. Antes, fue diputado bonaerense, desde 1995 hasta 1999. Militante de la Unión Cívica Radical, formó parte de la Alianza hasta el 2001, se referenció con el Frente para la Victoria en el 2007 y con el Frente Renovador en el 2013, para finalmente incorporarse al armado de Juntos por el Cambio desde el 2015.

"Las mayores críticas a Gustavo Posse son la falta de transparencia en la gestión y la falta de estímulo a la inversión", sostuvo Riganti, quien hizo hincapié en los años de gobierno del intendente: : "Posse esta su séptimo mandato. Gobierna desde 1999 y antes estuvo su padre desde el 1983. En 2027 le quiere dejar la intendencia a su hija".

Catalina Riganti es licenciada en Relaciones Públicas y Magister en Políticas Públicas. Es referente del partido vecinal ConVocación por San Isidro, sello con el que llegó al Consejo Deliberante. En sus apariciones públicas, se muestra cercana a dirigentes de Juntos por el Cambio y acompaña una agenda vinculada a las temáticas del medio ambiente y la educación.

"Los vecinos dicen que pagan impuestos como en Suiza pero no tienen servicios", sostuvo en una entrevista en AM 750 y analizó: "Se piensa que San Isidro es territorio de ricos. Hay 12% de población pobre, son 37.000 vecinos". En ese sentido, dio a conocer algunas de sus propuestas: "Planteamos urbanizar barrios populares, con iluminación y apertura de calles".