Resulta por de más vergonzosa la ‘batalla’ que en redes sociales han iniciado el actual alcalde de Guayaquil y la exalcaldesa. Nadie gana con estas reprochables conductas, siendo los grandes perdedores los habitantes.
El alcalde prometió a la ciudadanía que, al igual que lo hizo el exalcalde Febres-Cordero, iba a informar cómo recibía la ciudad, que según consta, durante cuatro años estuvo huérfana de una sana administración; transcurridas las semanas, hasta ahora no hay información que cuente con los debidos sustentos. Al margen de esa demora por parte del alcalde, los residentes en Guayaquil bien sabemos que las calles no tenían señaléticas, los pasos elevados vehiculares estaban con huecos, sin luminarias y sin pintar; el sistema de semaforización caótico, parques abandonados, avenidas y calles importantes con huecos profundos, cables aéreos que afectan la estética de la ciudad. En pocas palabras, la ciudad sufrió un retroceso y las obras construidas por los burgomaestres anteriores a la exalcaldesa carecieron de lo más elemental: mantenimiento. Todas estas novedades y muchas más fueron publicadas por Diario EXPRESO con la debida oportunidad; la respuesta municipal fue el silencio e indiferencia totales.
El alcalde Aquiles Álvarez no debe perder tiempo en cuestiones insustanciales con la señora exalcaldesa; lo que queremos los ciudadanos es que mediante documentales informe cómo recibió la administración, en especial lo concerniente a la situación económica, pues se recuerda que por pintar cuatro paredes con frases plagiadas le pasó la factura a los contribuyentes por aproximadamente medio millón de dólares, situación jurídica que reposa en los brazos de Morfeo en la Fiscalía del Guayas; paredes en las que, con el fuerte invierno, quizá no existan dichas frases. ¡Eso queremos saber, señor alcalde! Y si el caso lo amerita, antes de que transcurra mucho tiempo, debería solicitar a Contraloría que efectúe exámenes especiales sobre la administración de los calamitosos cuatro años de despilfarro y presentar la denuncia ante Fiscalía, ya que esto último también el alcalde expresó a la referida exempleada pública: que espere que las autoridades competentes le pidan cuenta.
Por lo demás, deseamos éxitos en la gestión al nuevo alcalde, para que devuelva la autoestima a los guayaquileños, con trabajo serio, profesional y honesto.
Víctor Terán