El diccionario de Oxford define a la democracia como el sistema político que defiende la soberanía del pueblo y el derecho de este a elegir y controlar a sus gobernantes; derecho que se ejerce a través del sufragio, saliendo electo quien obtuvo la mayoría de los votos válidos.

Dentro de un sistema democrático se entiende que se goza de legitimidad cuando ha sido hecho o ejecutado de acuerdo con la ley o el derecho.

La doctrina política y la lógica sostienen que la democracia se sustenta en el voto mayoritario de la población, la cual debe respeto al sistema y programa de gobierno presentado por el ganador, quien posesionado, ejerce la Función Ejecutiva. Dicho principio es destrozado cuando una minoría desde la Asamblea, pretende imponer sus caprichos y modelo de gestión, manejándose al borde de la legalidad.

Los legisladores deberían tener en claro que su compromiso no es con el partido, movimiento, ni con los dueños de dichos partidos y/o movimientos; su compromiso es con el pueblo que los eligió, para que generen leyes que promuevan la seguridad, la equidad, la salud, la educación y el trabajo, etc.

Resulta inaudito que se postulen para la reelección quienes en lugar de legislar en favor de la seguridad ciudadana se dedicaron a blindar la impunidad de corruptos y narcodelincuentes, a amnistiar a vándalos, a conspirar y oponerse a cuanto proyecto de ley enviara el Ejecutivo para generar inversión, empleo y seguridad en favor de la ciudadanía. Bajo tales circunstancias, corresponde al votante castigar dicha mala práctica negándoles el voto y que así sus partidos o movimientos desaparezcan.

Para concluir, recordemos aquella máxima que dice: el pueblo tiene los gobernantes que se merece. Si elegimos a los corruptos seguiremos pagando por lo que se llevaron; si elegimos narcopolíticos, seguiremos secuestrados y asediados por la narcodelincuencia. Si escogemos estadistas tendremos gobernantes con poder legítimo, que trabajarán para el bienestar de las futuras generaciones sin perder el tiempo trabajando para sus futuras reelecciones.