La Cancillería investiga junto al Ministerio de Seguridad un incidente fronterizo ocurrido en Corrientes con pescadores argentinos, que habría tenido como desenlace la incursión de la fuerza naval de Paraguay en territorio argentino y evaluar si corresponde o no avanzar con un "eventual reclamo" ante el gobierno de Mario Abdo Benítez.

"La Cancillería está trabajando junto al Ministerio de Seguridad -quien envió a la Prefectura a patrullar el límite del río- y confirmar los detalles del caso, antes de avanzar con un eventual reclamo ante Paraguay", ante un incidente denunciado por el gobierno de Corrientes, señalaron a Télam fuentes del Palacio San Martín.

Desde la cartera que encabeza Santiago Cafiero, indicaron además que "el hecho ocurrió en límites de río, por lo cual es necesario confirmar efectivamente cómo sucedieron los mismos y en base a ellos se realizarán las medidas que correspondan".

En una conferencia de prensa convocada este lunes, el gobernador de la provincia de Corrientes, Gustavo Valdés, denunció un incidente en la localidad de Ituzaingó, donde pescadores locales fueron supuestamente interceptados por una embarcación de la Armada paraguaya.

Valdés expresó su "preocupación" sobre el episodio que calificó como un acto de "agresión a la soberanía argentina" y aseguró que se están tomando las medidas pertinentes alrededor del hecho.

"Se están presentando las denuncias correspondientes en la Prefectura Naval Argentina, y estamos solicitando el desplazamiento de medios para garantizar la seguridad en la zona", afirmó Valdés, quien pidió la intervención de la Cancillería argentina para "asegurar el cumplimiento de los tratados internacionales que permiten la libre navegación por el río Paraná".

El incidente habría tenido lugar frente a Punta Ñaró, cuando un grupo de pescadores correntinos fue perseguido y atropellado por una embarcación de la Armada paraguaya.

El conflicto entre la Argentina y Paraguay por el episodio sumó un nuevo capítulo luego de que la Armada del vecino país emitiera un comunicado desmintiendo la versión nacional de lo ocurrido.

El escrito firmado por el capitán Ariel Benítez Liseras, director de Comunicación social del Comando de la Armada paraguaya, da una versión distinta a la denuncia presentada por los pescadores correntinos y ratificada por el gobernador Valdés.

Según el parte de las autoridades del país vecino, se realizaba actividad de pesca "aparentemente en forma irregular", y al ver al bote paraguayo acercarse los pescadores argentinos emprendieron "una precipitada fuga".

El texto mencionó luego que la nave paraguaya alcanzó la embarcación argentina "a la altura del kilómetro 1.442, denominada Punta Ñaro, en aguas jurisdiccionales paraguayas".

En rigor, Punta Ñaro está sobre el territorio continental argentino y sus aguas también son jurisdicción nacional.

Allí -según el comunicado de la Armada paraguaya- "se procedió a la inspección de la embarcación mencionada" a través del abordaje realizado por personal de la Prefectura paraguaya, con el fin de constatar "el cumplimiento de las normativas exigidas en la legislación paraguaya".

La Prefectura Naval incrementó su presencia en el río Paraná, a la altura de la localidad correntina de Ituzaingó, tras el confuso incidente que terminó con una supuesta intromisión de efectivos de la Armada paraguaya en territorio argentino.

Prefectura destinó a la zona cercana a la represa binacional Yaciretá al guardacosta "Río de la Plata", que generalmente patrulla aguas arriba.

Se trata de una de las naves que transita en la zona por pedido de la Cancillería nacional, que además tendría la misión de constatar si hubo una intromisión indebida de marinos paraguayos y presentar una pertinente queja ante el país vecino, según trascendió.