El despido de ocho trabajadores disparó ayer un nuevo conflicto entre la fábrica de neumáticos Bridgestone y el sindicato de la actividad, Sutna, que por la tarde declaró un paro de actividades en la firma. El gremio que conduce Alejandro Crespo comunicó que se trató de cesantías "injustificadas y arbitrarias", supuestamente "digitadas" por la empresa luego de que el Ministerio de Trabajo validara en un informe técnico denuncias de la organización relacionadas con supuestas irregularidades en las condiciones de seguridad e higiene de la producción.

La medida de fuerza comenzó tras una asamblea al mediodía y se prolongó hasta el ingreso del turno noche de ayer mismo. De todos modos el Sutna aclaró que analizará en lo inmediato la eventual extensión de medidas de fuerza y la adopción de respuestas legales frente a lo que considera "conductas antisindicales" de la multinacional con fábrica en la localidad de Llavallol.

El sindicato mantuvo hasta septiembre pasado un extenso conflicto con Bridgestone, Pirelli y FATE, las tres plantas fabriles que producen neumáticos en la Argentina, por la negociación salarial de la actividad. La paritaria, que se desarrolló con una demora de meses, derivó en un período extenso de desabastecimiento de neumáticos en el mercado local por las huelgas sindicales y los lock out patronales que alternaban ambas partes. Incluso el Gobierno se quejó en numerosas oportunidades, y a través de varios voceros, de una aparente intransigencia de Crespo a quien sindicaron como líder troskista. El secretario general y algunos colaboradores llegaron a pernoctar una noche en oficinas del Ministerio de Trabajo.

El conflicto de ayer se desató con los ocho despidos y se remonta al resultado de un informe técnico de la cartera laboral hecho a pedido del Sutna. En ese estudio, cuyos resultados difundió el propio sindicato, se destacaron párrafos que aludieron a una carga térmica al parecer incompatible con la distribución de las jornadas laborales por parte de la compañía. "En lugar de corregir inmediatamente estas graves deficiencias y garantizar un ambiente seguro de trabajo, la empresa responde con despidos en el marco de una conducta hostil y antisindical, demostrando total desprecio no sólo por la salud y la vida de los trabajadores, sino incluso por el sustento de sus propias familias", apunta el gremio en un comunicado.

Además, el Sutna denuncia que la empresa impidió el ingreso a la fábrica de los representantes sindicales "a los que se les han bloqueado las tarjetas para que no puedan entrar a planta a hablar con los trabajadores, otra conducta antisindical ilícita e inadmisible", agrega el texto.