¿Qué fue de la vida de Débora de Corral?

 ¿Qué fue de la vida de Débora de Corral?

Débora de Corral hoy tiene 47 años y está lejos de la modelo y conductora disruptiva que conoció la fama en los años 90, y que incluso fue novia de Charly Alberti y luego de Gustavo Cerati. De hecho, también está lejos del país, ya que está radicada desde hace tiempo en Miami, donde maneja un restaurante que figura en la Guía Michelin.

De hecho, Débora pasó unos años viviendo entre México, Los Ángeles y Buenos Aires, pero desde 2015 comenzó a establecerse en Miami, con el productor musical Gustavo Menéndez, su entonces novio con el que terminó casándose.

En el barrio Little River de Miami puso su propio restaurante, llamado "Tigre", al que definió como "un proyecto que venía madurando desde hace bastante tiempo, tiene mucho corazón”.

"Por suerte, me adapté enseguida, cosa que no me pasó en Los Ángeles. Me reencontré con argentinos que ya conocía, como Inés Rivero, y me conecté con argentinos que no conocía, latinos y algunos gringos con swing (risas). Lo genial de Miami es que tenemos una comunidad variopinta y multilatina muy cálida, una cualidad que en otros estados ya es más difícil de encontrar", contó.

Incluso, en 2022 su restaurante fue reconocido en la guía Michelin como uno de los mejores de Miami, lo que le suma una gratificación más a su nueva vida.

"Comenzó como un sueño y se construyó con mucho esfuerzo y sacrificio. Aún es un 'work in progress' y ciertamente lejos de ser perfecto, este sueño en acción con forma de restaurante que llamamos Tigre, ha sido seleccionado entre unos pocos restaurantes de Miami por la guía Michelin", contó en su cuenta de Instagram.

"Solo 2 restaurantes argentinos figuran en la guía (el otro es del gran Francis Mallmann, Los Fuegos). Orgullosa de mi equipo y mis socios, agradecida a esta ciudad que me abrió sus puertas y donde feliz he plantado bandera para seguir creciendo como Chef y como persona . Vamos por más ! (Hasta la primera estrella no paramos, ehhhhh)", agregó, orgullosa.

A los 16 años, y luego de ser parte de algunas campañas, su imagen irrumpió en la tapa de la revista Gente, lo que terminó de catapultar la carrera como modelo, para apenas un par de años después, ser también un ícono de la televisión de los ‘90 al frente del disruptivo programa El Rayo, símbolo estético de la década.

Ya para esa época incursionaría también en la música junto con Charly Alberti, su pareja en ese momento, con quien conformaría el dúo Plum, editando un disco de nombre homónimo con una amplia repercusión en los medios.

“Cuando no tenés estudios formales, dependés de tu capacidad de adaptación y de tus talentos naturales. O de tu capacidad de aprender cosas, que yo por suerte tengo. Y es un don y algo que agradezco mucho al universo. Tengo una capacidad de absorción, de aprender y de memoria que diría casi sobrehumana, y eso me ayudó a ser autodidacta y seria en lo que haga. Soy muy estudiosa también. No en el tradicional. Soy re nerd. Una nerd disfrazada de mina que está buena”, contaría en declaraciones a la prensa chilena.

Fue para esa época que desembarcaría en la pantalla chica al frente de El Rayo, ciclo que intentaba -y logró- romper con lo acartonado de los magazines de la época. Dos años comandando el envío cuya estética de graphs que entraban y salían de pantalla, información al espectador sobre lo que sucedería o destacando algún textual del entrevistado, llegarían hasta nuestros días.

Para los primeros días del año 2000 sorprendería a la prensa el inicio de su noviazgo con otro Soda Stereo, Gustavo Cerati. Fueron cinco años de amor, hasta que ella decidió poner fin al vínculo. “Con Gustavo de golpe la vida nos juntó y explotó una atracción que se convirtió en un amor, rápidamente irrefrenable. Él era una persona pública y yo hubiese preferido que no fuera tan grosso ni conocido. Que fuera él, pero en otras circunstancias. Pero no fue así, y lo que a él lo hacía ser quien era, más allá de quien era él espiritualmente y como persona, fue erosionando la relación y distanciando".

"No soy el tipo de mujer con la que él solía estar o que tuviera mucho sentido con que estuviera. Soy una persona con un carácter muy fuerte, independiente, no tenía la placidez para aguantar ciertos aspectos de estar con un rockstar. Y estuve con él por amor. Donde te lleva el amor te bancas esas cosas del otro, pero después con el tiempo, la cosa no funcionó”, recordó.

Recomendar A Un Amigo
  • gplus
  • pinterest
Commentarios
No hay comentarios por el momento

Tu comentario