La ciudad de Zaragoza, ubicada en el noreste de España, sufrió importantes incidentes en las últimas horas. Una tromba de agua, que llegó tras la alerta por fuertes tormentas y granizo, sorprendió a los vecinos al arrastrar vehículos, casas y árboles.

Las inundaciones en la capital aragonesa provocaron graves inundaciones y daños materiales, convirtiendo zonas como el Parque Venecia y algunas partes de la Z-30 en ríos. En tanto, se rescataron a una decena de personas que quedaron atrapadas en vehículos o subidas a árboles para evitar ser arrastrados por el agua.

Hasta el momento, no se registró ningún fallecimiento, ni tampoco consta que haya nadie desaparecido.

Durante la mañana de este viernes, más de doscientas personas continuaban trabajando en las zonas afectadas por la tormenta, entre efectivos del Cuerpo de Bomberos, Policía local, así como operarios de limpieza y buceadores.

El transporte público, por su parte, también se vio afectado debido a las acumulaciones de agua en las calles que, además, dejaron a varias personas atrapadas y arrastraron vehículos a su paso. El servicio de tranvía quedó interrumpido por completo, mientras que las líneas de autobuses se desviaron para esquivar las calles inundadas.

Como consecuencia, seis personas fueron trasladadas a los hospitales Miguel Servet de Zaragoza y al General de la Defensa. Sin embargo, a pesar de la magnitud de la situación, no hubo ningún herido de gravedad.