El dólar experimenta este jueves un descenso significativo, alcanzando su nivel más bajo desde abril pasado y encaminándose hacia su mayor caída semanal en lo que va del año. Los operadores financieros interpretaron una lectura baja de la inflación como una señal de que las tasas de interés en EEUU podrían llegar a su punto máximo este mes.

Los datos económicos estadounidenses que se conocieron el pasado miércoles revelaron que la inflación se desaceleró de manera más pronunciada de lo previsto el mes pasado. Esto generó la mayor venta de dólares en un solo día en cinco meses y llevó a la moneda estadounidense a su nivel más bajo en más de un año frente al euro y la libra esterlina, así como a su nivel más bajo en más de ocho años frente al franco suizo.

La inflación subyacente en Estados Unidos se situó en un 0,2% en junio, en contraste con las expectativas del mercado que apuntaban a un 0,3%. Mientras tanto, el índice de precios al consumidor general anual cayó al 3%.

Los futuros de las tasas de interés indicaron que los mercados han descontado por completo otra subida de tasas por parte del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) a finales de este mes, pero las expectativas de futuros incrementos se han desvanecido.

La reducción de la brecha entre las tasas de interés en Estados Unidos y el resto del mundo impulsó a otras divisas frente al dólar, especialmente al euro, la libra esterlina y el yen.

El euro estaba en camino a registrar su sexto aumento diario consecutivo, lo que representa su racha más larga de ganancias frente al dólar en lo que va del año. La moneda europea avanzó un 0,4%, llegando a 1,1173 dólares, tras haber alcanzado previamente un máximo de 1,1175 dólares.

La libra esterlina también experimentó un incremento del 0,6%, llegando a 1,3073 dólares, en su sexta jornada consecutiva de ganancias, después de superar la marca de los 1,30 dólares por primera vez desde abril del año pasado.

Los datos del jueves revelaron que la economía británica se contrajo menos de lo esperado en mayo, lo que refuerza la idea de que el Banco de Inglaterra podría permitirse aumentar aún más las tasas de interés sin afectar negativamente el crecimiento económico.

El yen, que ha aumentado un 4% en los últimos cinco días, se mantuvo estable a 138,565 unidades por dólar, en parte gracias a otra caída en los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense, los cuales el par dólar/yen tiende a seguir de cerca.

Por su parte, el franco suizo experimentó un incremento del 0,4% frente al dólar, alcanzando su nivel más alto desde que el Banco Nacional Suizo eliminó la fijación de la moneda nacional a principios de 2015, situándose en 0,8634 unidades por dólar.