Anglo American acordó vender su negocio de carbón siderúrgico a Peabody Energy Corp. por una cantidad que podría ascender hasta los US$ 3.780 millones, a medida que la reestructuración de la minera cobra ritmo.
Anglo, que cotiza en Londres, está tratando de simplificar drásticamente -y reducir- su negocio en un movimiento que fue anunciado durante una exitosa refutación de una oferta de US$ 49.000 millones de BHP Group previamente este año. Las acciones de Anglo subieron hasta un 2,9% en las operaciones de Londres.
La venta de sus operaciones de carbón se consideraba el primer paso más sencillo del proceso —que también implica salir del platino, el níquel y vender o escindir De Beers—, pero se vio obstaculizada por una explosión y un incendio en Grosvenor, la mayor de sus cinco minas australianas.
“La venta de nuestro negocio de carbón siderúrgico es otro paso importante hacia la consecución de la estrategia que establecimos en mayo de crear un negocio de cobre, mineral de hierro de primera calidad y nutrientes para los cultivos de categoría mundial”, dijo el director ejecutivo de Anglo, Duncan Wanblad, en un comunicado en el que anunciaba la venta el lunes.
Anglo dijo que obtendría US$ 2.050 millones en efectivo por adelantado de Peabody, una minera de carbón estadounidense, y otros US$ 725 millones en pago diferido. La empresa podría recibir otros US$ 550 millones en función del precio del carbón y US$ 450 millones en función de la reapertura de su mina Grosvenor.
El negocio abarca cinco minas en Queensland, que en conjunto produjeron 16 millones de toneladas de carbón de coque en 2023. Más de una docena de compradores potenciales se disputaron los activos. Anglo vendió anteriormente una participación de US$ 1.050 millones en otra mina de carbón australiana.
Para Peabody, el acuerdo la impulsará hacia el puñado de productores que dominan el mercado del carbón siderúrgico. Actualmente, la empresa conjunta BHP Mitsubishi Alliance y Glencore Plc son los mayores productores.
La transacción también marca un giro notable para Peabody. La empresa solicitó previamente la protección por bancarrota en 2016, como parte de una oleada de mineras estadounidenses que se vieron afectadas por los precios baratos del gas.
Desde entonces, Peabody ha tratado de crecer en el mercado internacional del carbón de coque y ha intentado comprar otros activos australianos en 2022.
Anglo se centrará ahora en sus planes para escindir su participación mayoritaria en Anglo American Platinum Ltd., que espera completar el próximo año. También busca salir de la minería del níquel.
Los planes para vender o escindir De Beers se han complicado por la fuerte caída del mercado del diamante. Anglo preferiría esperar a una recuperación, ya que la empresa considera que De Beers debería alcanzar un precio que refleje su condición de activo trofeo.