"Lo que es bueno para el planeta, es bueno para las comunidades y es bueno para el negocio"

Este jueves 13 de abril se llevó a cabo el primer encuentro del año de Ámbito Debate, un ciclo de charlas que tiene como objetivo fomentar el intercambio entre los principales actores de la economía argentina.

En esta oportunidad, se abordó la Sustentabilidad, una de las principales inquietudes de empresas y gobiernos en la actualidad. Bajo el título "Sustentabilidad: hacia una economía más responsable", diversos especialistas y referentes de la materia disertaron sobre los desafíos, el rol estratégico que esto reviste y la importancia de educar, concientizar y comunicar al respecto.

El primer panel se llamó “Empresas y comunidad: un vínculo positivo”, fue moderado por Julián Guarino y participaron Agustina Zenarruza, Gerente de Sustentabilidad en Pan American Energy; Juan Carlos Mirande, Gerente de Relaciones Institucionales de Los Balcanes S.A.; Ignacio Duelo, Gerente de Comunicación Institucional de Ledesma; y Carlos Galmarini. Director de Asuntos Públicos y Comunicaciones en Ford Argentina.

Al analizar cómo las empresas conciben el concepto de sustentabilidad y los cambios que se están llevando a cabo, Zenarruza sostuvo: “Soy gerenta de Sustentabilidad, pero la sustentabilidad excede mi rol. La sustentabilidad atraviesa todo el negocio, tiene que ver con lo que se desarrolla desde nuestro lugar de trabajo. Toda la política que tiene la empresa en su modelo de negocios, es sustentable”.

“Nosotros entendemos la sustentabilidad planteándonos el desafío de hacer las cosas bien hoy, sin afectar cómo se pueda hacer a futuro. Y hacerlas mejor de lo que las hicimos ayer. Que lo que hacemos hoy se pueda proyectar en el tiempo. Así pensamos en el tema y así estamos trabajando. Desde un punto de vista de generación positiva para la mitigación del impacto del cambio climático”, explicó por su parte Mirande.

Para Galmarini, “la sustentabilidad está en la agenda desde hace décadas en Ford y atraviesa todas las áreas de negocio”. “Impulsa todas las decisiones que estamos tomando. Lo que es bueno para el planeta, es bueno para las comunidades y es bueno para el negocio. La sustentabilidad social y ambiental y el éxito del negocio, están intrínsecamente relacionados. Por eso, la estrategia específicamente de sustentabilidad de Ford busca impulsar el progreso humano en base a tres iniciativas: qué tipo de vehículos producimos, buscamos crear un ecosistema de transporte inteligente y en cómo contribuimos al desarrollo de la comunidad. Ninguna empresa puede ser más exitosa que la comunidad en la que trabaja. Está relacionado con el crecimiento de la empresa”, detalló.

“En el caso de Ledesma, este año cumplimos 115 años y es un caso muy interesante, porque la compañía nació donde no había nada y, con el tiempo, alrededor de la compañía se gestó un pueblo, que hoy tiene 60 mil habitantes. Y alrededor de eso, un paraíso natural, que Ledesma preserva, en una superficie de 100 mil hectáreas”, sostuvo por su parte Duelo, quien agregó: “Ledesma, desde su fundación, por naturaleza, tenía que cuidar la tierra. Aun antes que el concepto de sustentabilidad existiera. Es una empresa que cuidó y generó productividad. Alrededor de eso se gestiona la sustentabilidad. Se trazan estrategias. Pero por naturaleza, una compañía que trabaja con la tierra, nace con la cabeza puesta en cuidar a la naturaleza y la comunidad que vive alrededor de ella”.

Específicamente, al hacer mención a cómo es la relación de estas empresas con la comunidad, Zenarruza explicó: “Nosotros, por el tipo de negocio que desarrollamos, convivimos con la comunidad donde operamos. Nuestro vínculo se plantea desde el inicio como un vínculo a largo plazo. Y promovemos mejorar la calidad de vida de esas comunidades de las que somos parte. Por ende, nos proponemos contribuir con herramientas que mejoren los sistemas que se utilizan en esa comunidad”.

“Por ejemplo, tenemos un programa de empoderamiento de pymes, para desarrollar el entramado productivo. Esto es antes de que se comience a hablar de los ODS. Son conceptos que han ido cambiando, pero la esencia es anterior”, explicó Zenarruza.

En tanto, Mirande explicó el rol histórico y actual de la compañía: “Antes, la caña se transportaba en tren, pero eran trenes a vapor y la leña se cargaba cada 15 kilómetros. Había una estación de tren cada 15 kilómetros y así fueron creciendo pueblos a su alrededor. En muchos lugares, también, primero se instaló el ingenio y la comunidad se fue creando alrededor”.

“Puntualmente en nuestro caso, somos una empresa que se define como bioenergética. Nos dedicamos a la producción de energías renovables, es energía líquida como el bioetanol, que se utiliza en todo el país. Tiene una muy baja huella de carbono. Generamos energía a partir del azúcar. Y también generamos energía eléctrica a partir de la biomasa de la caña de azúcar, parte la usamos y parte la vendemos. Además, estamos trabajando mucho en la circularidad de la economía. Tenemos la fábrica de compost más grande de Argentina”, remarcó Mirande.

En cuanto al vínculo con la comunidad, el gerente de Los Balcanes, contó: “Una pata de la sustentabilidad también es la educación y las comunidades a las que nos debemos. La circundante a los ingenios y la provincia toda. Más allá de la producción sustentable, el acompañamiento y la devolución de servicios hacia los empleados, es importante. Damos una especial formación a la gente que está desarrollando actividades que son novedosas”.

“No existe una empresa exitosa y que progrese, en una sociedad que no sea exitosa y progrese. El sector privado tiene una doble responsabilidad. Cuando Ford se instala en Pacheco, no existía ni la Panamericana, por ejemplo. Hoy allí funciona un polo industrial”, remarcó Galmarini.

“Desarrollar la cadena de valor es importante: hoy más del 40% de las partes que compramos son locales, gracias al desarrollo de proveedores. Es una parte muy importante. También desarrollamos programas específicos para contribuir con la sociedad. El foco más importante está en la educación. Tenemos programas con más de 50 años, como la escuela técnica Henry Ford. O el programa de escuelas rurales, que construimos con los concesionarios a lo largo del país. Y programas más nuevos, que apuntan a problemáticas más actuales: como darle soportes a chicos de todo el país para que terminen el secundario. Y brindar herramientas para que los chicos que están terminando el secundario puedan conseguir trabajo”, subrayó Galmarini.

Duelo, en tanto, señaló también que “la empresa crece con la comunidad”. “Casi la totalidad de los empleados viven ahí. En Ledesma todos son comunicadores. Cualquier cosa que pasa, suele conocerse a través de los trabajadores. Es un sistema muy natural”, remarcó.

“Ledesma tiene distintos ejes: educación, salud y bienestar, deporte y cultura, empleo y empleabilidad. Todos estos programas tienen muchos años de antigüedad y lo llevamos con mucho éxito. Además, en una conversación permanente con la comunidad. Hay un equipo de Ledesma destinado a recibir las inquietudes de los vecinos, con el objetivo de crecer con la comunidad y solucionar los problemas con todos”.

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