Natalia Pérez Aguin, gerenta de Comunicaciones de Massalin Particulares, hizo mención a cuáles son las principales estrategias de sustentabilidad de la compañía, así como también explicó los programas que se llevan a cabo con toda la cadena de valor y los nuevos productos que desarrolla la firma.

“Massalin Particulares tiene 120 años de historia en Argentina. Tenemos programas de sostenibilidad que tienen muchos años. Somos una organización que forma parte de una empresa global, que tiene muy alineado su sistema de negocios con la sostenibilidad. Philip Morris busca transformar el negocio para eliminar la combustión. Esto se traduce en la sustentabilidad, porque cambia nuestro producto y la estrategia de sustentabilidad va de la mano de este producto nuevo”, explicó.

Al referirse a la cadena de valor, la gerente de comunicaciones de Massalin Particulares sostuvo: “Tenemos programas con toda la cadena de valor. Philip Morris compra tabaco en Argentina y nosotros tenemos una gran responsabilidad para las provincias y los productores que están en esas provincias. Tenemos programas para erradicar el trabajo infantil, por ejemplo. Lo implementamos en alianza con la Asociación Conciencia. Y está alineado con un programa de la cadena a nivel global, que es cero trabajo infantil en la cadena de valor. En Argentina, el programa contuvo a muchos niños y niñas, para mejorar las condiciones de sus familias y concientizar sobre esta problemática”.

En ese sentido, resaltó la importancia ser una compañía “con propósito”. “Nuestro principal proyecto es la transformación del negocio, invertir para generar alternativas al cigarrillo. Es lo que estamos buscando hace décadas: el principal problema de fumar, es la combustión. No por la nicotina. En ese sentido, Philip Morris invirtió para tener distintas alternativas, que en el mundo hoy son una realidad”, resaltó.

“Nuestra principal alternativa es un producto que calienta el tabaco en lugar de quemarlo. Son dispositivos que tienen una experiencia de uso mucho más similar a la del cigarrillo. Una alternativa que están pensadas para los millones de fumadores que hay en el mundo. En Argentina hay 7 millones de fumadores, gente que va a seguir fumando y no va a dejar el producto: gracias a la tecnología, se le puede dar una respuesta más saludable”, explicó Pérez Aguin.

“El producto de tabaco calentado está presente en más de 70 países y vemos como diferentes países van actualizando sus normativas y lo incluyen. En Argentina, el ministerio de Salud prohibió los productos de tabaco calentado. Es una decisión que se tiene que rever, porque coarta la posibilidad de darle a los fumadores alternativas que en otros países del mundo tienen. Ahí lo que tratamos de ver es que se regule el producto, para no dejar sin esta alternativa a los fumadores”, concluyó.