Por decisión del ministro de Economía, Sergio Massa, se fijó este martes 25 de abril un cambio en el mínimo para abonar Impuesto a las Ganancias, política que beneficia fundamentalmente a la clase trabajadora. A partir de mayo, "sólo pagarán el Impuesto a las Ganancias las remuneraciones superiores a $500.000”.
De esta forma, "ya no corresponderá retención alguna del tributo cuando la remuneración bruta no supere los $506.230 inclusive", según explicó el Palacio de Hacienda en un comunicado. Y en aquellos meses en que la remuneración bruta del mes supere los $506.230 y resulte inferior o igual a $583.851, "los agentes de retención computarán una deducción especial incrementada".
La modificación permitirá una reducción del total de trabajadores que pagan Impuesto a las Ganancias. Según precisaron, se beneficiarán aproximadamente 250.000 empleados en relación de dependencia.
La propuesta está relacionada con la variación de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) de 25,29% entre octubre de 2022 y febrero de 2023, según los últimos datos publicados hasta el momento.
Actualmente y desde enero de 2023, no pagan el impuesto a las Ganancias las remuneraciones brutas mensuales que no superen los $404.062 inclusive.
En el comunicado, desde Hacienda detallaron que esta medida se toma en el marco de un plan para producir un mayor alivio fiscal. En las últimas semanas se acordó con la Confederación General del Trabajo (CGT) la posibilidad de dejar exento del pago de Ganancias a una serie de adicionales, entre los que se encuentran:
Desde ese entonces, en Economía puntualizaron que esta medida beneficiará a más de 600.000 trabajadores en relación de dependencia.