A la hora de desarrollar una actividad vinculada con la minería, las empresas realizan sus propios controles, pero también el Estado lleva a cabo el seguimiento de distintas variables para certificar que todos los parámetros sean correctos.

Durante su exposición, Flavia Romero, geóloga del Ministerio de Minería de Catamarca, explicó cómo se llevan a cabo esos controles desde los distintos organismos públicos: “El Estado hace fiscalizaciones a través de controles y auditorías ambientales, de forma mancomunada con todos los organismos institucionales. Se controla el agua, el aire, la biodiversidad. Más allá de la autoridad de aplicación de la minería, es necesario tener la expertise de distintos organismos que intervienen en los controles”.

Estos controles generan información que está al alcance de la comunidad. “Se puede acceder a la información en los informes de impacto ambiental, que son distribuidos para que la gente pueda acercarse a los centros de control y hacer consultas de los proyectos mineros. Esto sirve para que los vecinos canalicen denuncias, consultas e inquietudes respecto al proyecto. Si requieren información específica, evacuamos esas dudas”, detalló Romero.

Por ejemplo, al analizar cómo es el tratamiento de los desechos industriales, Romero explicó: “La empresa debe dejar plasmado qué trabajos va a realizar y lo que va a generar a partir de esa actividad. Por eso se hace hincapié en que los documentos que presentan son fiscalizados por distintos organismos gubernamentales. En cuanto a residuos, siempre las decisiones se toman de manera conjunta, y bajo una mirada integral, tenemos una devolución final de cómo se encuentra el proyecto. De la misma manera, la empresa está obligada a comunicar cualquier tipo de incidente y tomar cartas en acciones preventivas y correctivas de manera inmediata. Como Estado, se hace una fiscalización par ver cómo se están tomando las medidas correctivas de ese incidente”.