Los empresarios están muy preocupados por la situación económica y la incertidumbre política –inquietudes que en no pocos casos llevan a la decepción-. Así resulta de las exposiciones y las conversaciones en los pasillos del Summit organizado por la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la Argentina (Am Cham) que congregó este martes a más de 1500 empresarios en el hotel Alvear de Puerto Madero.
En este sentido, Facundo Gómez Minujín, titular de la entidad, alertó en el discurso inaugural del encuentro que el país está “navegando en un banco de niebla” y trazó un sombrío panorama al adelantar que “se espera una nueva recesión con inflación debido a una sequía sin precedentes y a la falta de divisas para importaciones”.
Una de las definiciones más importantes del encuentro la dio el ministro Sergio Massa al defender la intervención oficial en el mercado de cambios, una medida a la que el Fondo Monetario Internacional históricamente se opuso. El titular del Palacio de Hacienda dijo que “una cuestión que para nosotros es central es la capacidad de intervención del Banco Central que es irrenunciable”.
El ministro explicó que es así “básicamente porque los años políticos electorales en la argentina siempre generan esta idea de me preservo, dolarizo cartera, generan esta sensación de incertidumbre y obviamente que el Banco Central tenga capacidad de intervención y que el Estado tenga alguna capacidad de intervención es para tener no herramientas para distorsionar mercados, sino herramientas para generar certidumbre, tranquilidad, en momentos en que la incertidumbre política puede generar alguna situación de dificultad”.
Otro de los disertantes que efectuó declaraciones que impactaron a los presentes fue Horacio Rosatti. El titular de la Corte Suprema de la Nación sostuvo “La Constitución manda a defender el valor de la moneda lo cual tiene que llamarnos la atención respecto de la expansión incontrolada de la emisión monetaria porque eso implica no defender el valor de la moneda y traicionar el mandato de la Constitución que está por encima de todos nosotros”.
Al respecto, los asistentes se preguntaban, que tipo de medidas eventualmente podría tomar la Corte Suprema en este sentido, especialmente luego de conocido los fallos por los cuales se suspendieron las elecciones de Tucumán y San Juan a cinco días de los comicios.
La falta de dólares y las quejas por las demoras en la aprobación de las SIRA ocupo la atención de todas las charlas informales en los coffee break. Massa respondió a esta inquietud al indicar de qué manera se está haciendo frente a la perdida de divisas por la sequía.
Resalto que una primera decisión fue dejar de importar casi 1.900 millones de dólares avanzando en la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
Otra de las medidas fue anticipar compras energéticas aprovechando el final del invierno europeo. Contra un presupuesto de U$S 3.800 millones se terminaron gastando U$S1.900 millones.
Asimismo, explicó que se activó el swap de yuanes que será de U$S 5.000 a ser utilizados en el lapso abril -agosto. En este sentido, recordó que el swap es hasta USD 19.000 millones y que en junio se renovará la operación con la posibilidad de ampliarla.
En la entrevista que llevo a cabo Gómez Minujín a Massa no faltó la pregunta respecto al acuerdo con el FMI. En este sentido, el titular del Palacio de Hacienda sostuvo que “el front load (anticipos) estatutariamente una de las herramientas que tiene el Fondo para llevar adelante” y aclaró que “está todo sobre la mesa en la discusión con el Fondo, absolutamente todo”.
El FMI y la posibilidad de adelantar fondos al país fue uno de los temas más conversados por los empresarios en el marco de una preocupación general sobre “cómo llegar a agosto”, cuando las elecciones primarias empezarán a despejar el panorama político.
Una parte de los asistentes consideró que “el Fondo no nos dará la plata” mientras que otros prevén que el organismo podría disponer de adelantos, pero bajo la condición de una mayor devaluación, algo que consideraron que el ministro no estará dispuesto a hacer porque agravaría la situación social.
Por otra parte, el ministro aclaro que en materia del financiamiento del sector público los vencimientos de mayo se están trabajando con los bancos, Fondos comunes de Inversión e inversores institucionales y “se puede recorrer perfectamente”. Manifestó el titular del Palacio de Hacienda, que el segundo semestre no le preocupa “porque el 85 % aproximadamente de la tenencia de los vencimientos es intra sector público”.
Facundo Gómez Minujín, le hizo la pregunta que el auditorio esperaba y que Massa tenía toda la intención de responder. ¿“Vas a ser candidato”? lo que provocaron risas en el auditorio.
Massa no eludió la respuesta, recordó su larga carrera política, menciono el rol importante que cumple su familia para su vida: “La familia que tengo es lo más importante que construí en mi vida. Eso es un condicionante”.
Luego, aseveró que “creo que un gobierno, por más que sea un gobierno de coalición, tiene la obligación de dar certidumbre, y parte de esa certidumbre es no exponer a la sociedad sus debates internos”.
Al respecto, planteo “Nosotros nos tenemos que pelear puertas adentro. Esto de querer exponer en una primaria si el gobierno tiene diferencias o no las tiene, la verdad que me parece un gravísimo error”. Respuesta que el auditorio interpreto como “Si no soy candidato de consenso, no cuenten conmigo”.
Pero, ante la re pregunta de qué medidas tomaría si fuera presidente, Massa afirmó que al próximo presidente le diría lo siguiente: “que sobre cinco temas tiene que construir políticas de Estado”. Y, pasó a enumerarlos: el tema alimentario, seguridad energética, el recurso mineral -se pasará U$S 3.000 millones de dólares de exportaciones de mineras 2021 a casi U$S19.000 en el 2030-.
El cuarto punto que enumero es el correspondiente a la economía del conocimiento y el quinto es la agenda institucional. En este tema explicó que “cuando un gobierno elige un rumbo y aparecen a defender intereses prebendarios con instrumentos de la justicia que terminan, desde la idea de la emergencia, siendo instrumentos permanentes, estamos frente a un problema”.
Para Massa la solución a este problema es que “los instrumentos de emergencia que tiene para aplicar la justicia deben ser de emergencia, y los remedios de fondo son los fallos de fondo, pero no podemos seguir en un esquema en el cual los remedios transitorios para evitar abusos del Estado se terminen transformando en medidas permanentes de protección de intereses prebendarios de sectores económicos”.
De los discursos de los políticos, uno de los que despertó más interés fue el que pronunció Patricia Bullrich ya que, según evaluaron los asistentes, dio definiciones. “Hay que terminar con el cepo, ningún empresario va a poner plata si no le dejan sacar dinero. Vamos a un solo tipo de cambio, al uso del dólar como moneda de transacción”, aseveró.
En materia laboral dijo que “hay que trabajar sobre la indemnización, volviendo un número razonable porque hoy la indemnización no es razonable”. Y sostuvo que hay que sacar a los convenios colectivos de ultraactividad “porque es una espada de Damocles sobre las empresas; son convenios del año 1975, todo un sistema fuera de lo que es hoy la forma de trabajo”.
Otro candidato opositor, Horacio Rodríguez Larreta, tuvo una exposición que fue calificada de “generalista” por varios de los empresarios, aunque, al igual que Bullrich, aseguró que iría a un tipo de cambio libre y llevaría a cero el déficit fiscal en un año.
Un elemento que rescataron los empresarios es que tanto Rodríguez Larreta como Bullrich señalaron que, si alguno de ellos ganara las elecciones, los equipos técnicos del otro se podrían a disposición del triunfador.