El príncipe Harry, su esposa Meghan Markle, y la madre de ella, padecieron lo que se denominó una "persecución aterradora" por parte de pararazzis, luego de asistir a una ceremonia de premios en Nueva York.

Un portavoz de los duques de Sussex calificó como "casi catastrófico" al incidente, se produjo cuando los paparazzi comenzaron a seguir de cerca al vehículo en el que se encontraban los miembros de la familia real.

“Esta persecución implacable, que duró más de dos horas, casi resultó en múltiples colisiones con otros conductores, peatones y dos agentes del Departamento de Policía de Nueva York”, agregó el vocero.

Durante el angustiante episodio, el príncipe Harry y Meghan Markle tuvieron que tomar medidas drásticas para intentar evadir a los paparazzi y garantizar su seguridad. La pareja real y su acompañante se vieron obligados a cambiar de ruta en varias ocasiones dentro de un taxi.

El incidente pone de manifiesto una vez más los desafíos y la intrusión constante a la que se enfrentan los miembros de la realeza y las personas públicas en cuanto a su privacidad y seguridad. A pesar de los esfuerzos de los duques de Sussex por proteger su intimidad, los paparazzi continúan persiguiéndolos, poniendo en peligro su bienestar y el de quienes los rodean.

Después de la Coronación de Carlos III, el Príncipe Harry y Meghan Markle irradiaban felicidad mientras abandonaban un salón del Ziegfeld Ballroom en Nueva York el martes por la noche, marcando así su primera aparición en público. En ese memorable evento, la duquesa fue honrada con un premio por su destacado liderazgo en el ámbito feminista, en conmemoración del 50 aniversario de la Fundación Ms. para la Mujer.

En la gala en Nueva York, la duquesa recibió el premio Women of Vision de la Ms Foundation, en reconocimiento a su incansable defensa global para empoderar y abogar en nombre de las mujeres y las niñas.

La muerte de Diana de Gales fue un acontecimiento que tuvo lugar en las primeras horas del 31 de agosto de 1997 cuando Diana Spencer, princesa de Gales, murió a causa de las heridas producidas en un accidente automovilístico ocurrido en el interior del túnel del Alma, en París (Francia), cuando precisamente escapaban del asedio de los fotógrafos de prensa, con su pareja Dodi Al Fayed.

En el accidente, solamente sobrevivió el guardaespaldas de Dodi, el único que llevaba el cinturón de seguridad: Al Fayed y el conductor del vehículo, Henri Paul, murieron al instante, mientras que Diana fue llevada al Hospital de la Pitié-Salpêtrière, donde posteriormente falleció.