Día Mundial del Whisky: su historia, todos los secretos y recomendaciones para disfrutar

 Día Mundial del Whisky: su historia, todos los secretos y recomendaciones para disfrutar

Desde 2012, el tercer sábado de mayo de cada año se celebra el Día Mundial del Whisky. Se trata de una jornada que suma cada vez más fanáticos, desde aquellos que consumen esta noble bebida hace décadas hasta los que recién empiezan a meterse en este fascinante universo.

Informate más: ¿Cómo se festeja el Día del Whisky en Uruguay, el segundo país más consumidor del mundo?

En Argentina, si bien el perfil del consumidor de whisky aún mantiene esa figura “clásica”, año tras año, el panorama ha cambiado. En 2023 se observan dos datos alentadores como tendencia en la industria del consumo: por un lado, los jóvenes (especialmente el rango de 25 a 40 años de edad) que se acercan cada vez más; y el público femenino, que ha desarrollado un interés especial, dando una presencia mucho más fuerte.

Los antiguos celtas, quienes fueron los primeros en fabricar una bebida destilada muy similar, un tipo de aguardiente que hace más de 2.000 años elaboraban para combatir el frío invierno en tierras escocesas, especialmente en el norte, en las “Highlands”.

Hacia el siglo XV apareció el whisky, o al menos similar al que hoy conocemos. La primera botella del famoso destilado data de 1494, fecha de la cual se tiene el primer registro histórico, con origen (cuándo no) en Escocia. Se trataba de una bebida hecha por monjes, quienes lo fabricaban con propósitos medicinales para curar males y dolores de garganta. De ahí que se ganó el mote de “agua de vida”.

Por definición, el whisky es un tipo de bebida alcohólica destilada a base de cereales fermentados. Se utilizan varios granos, los cuales pueden estar malteados, entre ellos trigo, cebada, centeno y maíz. El whisky escocés (el Scotch) está hecho principalmente de cebada malteada y es uno de los que más se consumen alrededor del planeta.

“El whisky es una bebida sin mentiras y sin secretos”. Así lo definió Miguel Reigosa, director del Museo del Whisky, ubicado en el barrio porteño de Villa Urquiza y dueño de un récord mundial de botellas de esta sagrada bebida, en diálogo con Ámbito.

En líneas generales, los whiskys pueden ser de dos tipos, según la materia prima que se use. Pueden ser single, es decir, hechos a base solo de un ingrediente. Por ejemplo el single malt (solo cebada malteada).

También pueden ser blended. Se trata de un tipo de whisky producido a partir de la mezcla de dos o más variedades, que pueden ser fabricados de cualquier combinación de granos malteados y/o no malteados. Pueden ser blends solo de maltas (hay una gama amplia de ellas) o bien de distintos ingredientes.

Estos últimos son los más consumidos en el mundo por lejos, donde el 95% es blend y 5% single. “Hay dos formas de consumir: por la pasión, como nosotros, que disfrutamos lo que hacemos. O bien para lograr un efecto, para ahogar una pena como se suele decir. Esto último acá no lo hacemos, estamos lejos de eso. Creo que ahí está la importancia de la divulgación”, sintetizó Reigosa.

En Escocia, el whisky proviene de los vastos campos y colinas de sus cinco regiones protegidas: Campbeltown, Islay, Highland, Lowland y Speyside.

La disputa entre Escocia e Irlanda pasa por la metodología, donde cada uno dice ser el autor del mejor whisky del mundo. Una de las principales diferencias entre ambos es el proceso de destilación.

El whisky escocés se destila dos veces mientras que el irlandés se somete a una triple destilación. “Esto le da una marcada ligereza y suavidad, que caracteriza al whisky irlandés, este triple destilado est presente al momento de saborearlo” explica Agustín Giuliani, Brand Ambassador de Pernod Ricard y experto en la materia.

En el caso del bourbon, necesita ser producido íntegramente en Estados Unidos y tiene una composición al menos del 51% de maíz, además de almacenarse en barriles nuevos de roble carbonizado. En el caso del whisky, los barriles deben ser de roble pero no nuevos ni carbonizados.

El single malt goza de una gran reputación entre los amantes de esta bebida en todo el mundo. Cada segundo, 40 botellas de whisky escocés se envían desde Escocia a 180 mercados de todo el planeta, más de 1.100 millones de botellas cada año, según la Scotch Whisky Association (SWA).

Para tener una idea, estas botellas colocadas de punta a punta, se extenderían unos 342.000 km, es decir que casi se podría llegar a la luna si se comparan las distancias. Lo que significa que en Escocia se albergan más de 20 millones de barriles de whisky maduro, o sea, casi cuatro barricas por persona en ese país. Se estima que para el año 2027, esta industria moverá ingresos por u$s33.000 millones.

En cuanto a volumen, los países que más movimiento tienen son Estados Unidos, Francia y la India, en el podio. El top diez se completa con Reino Unido, Alemania, España, Sudáfrica, México, Canadá y Brasil.

En diálogo con Ámbito, Agustín Giuliani dejó una serie de recomendaciones para todo tipo de público, desde los que recién se inician en el mundo del whisky hasta los más expertos.

Recomendar A Un Amigo
  • gplus
  • pinterest
Commentarios
No hay comentarios por el momento

Tu comentario