El delantero colombiano Hugo Rodallega, del Independiente Santa Fe de Bogotá, denunció que en la noche del martes fue objeto de insultos racistas por parte de hinchas de Gimnasia y Esgrima de La Plata, en el partido que ambos equipos jugaron por la Copa Sudamericana, en el Bosque platense.
“Que te llamen mono, negro… Es una falta de respeto. Ya cansa el tema del racismo”, dijo el atacante, de 37 años, una vez finalizado el accidentado encuentro (con tres expulsados) en el estadio Juan Carmelo Zerillo.
“En Bogotá los tratamos bien” agregó a los micrófonos de ESPN el jugador que supo vestir las camisetas del Fulham y Wigan (ambos de Inglaterra), Trabzonspor (Turquía), Monterrey y Atlas (los dos de México), entre tantas otras instituciones.
Rodallega continuó su alocución por los insultos xenófobos que recibió durante el encuentro en La Plata y manifestó: “No mejoramos como humanidad. Es un desastre lo que pasa en el mundo entero”, en alusión al difundido episodio que involucró al brasileño Vinicius, hostigado en la visita del Real Madrid al Valencia, el pasado fin de semana.
Gimnasia ganó por 1-0 el cotejo válido por la zona G del torneo continental, que fue arbitrado por el venezolano Angel Arteaga y tuvo tres tarjetas rojas: Felipe Sánchez en el equipo local; y Wilson Morelo y Juan Daniel Roa, en el visitante.
Hinchas triperos luego señalaron que el plantel fue objeto de diversos actos de hostilidad en el encuentro en Colombia, para justificar el clima hostil registrado en el Bosque platense.
Los insultos sufridos por el delantero brasileño Vinicius Jr. el domingo en el estadio del Valencia, durante el partido entre el local y el Real Madrid, levantaron una nueva ola de indignación, haciendo planear de nuevo la sombra del racismo en el fútbol español.
“Lo primero es reconocer que tenemos un problema de comportamiento, de educación, de racismo...”, afirmó el presidente de la Federación Española (RFEF), Luis Rubiales, para el que “mientras haya un solo aficionado, un solo indeseable o grupo de indeseables, que insulte por condición sexual, por color de piel o credo, tenemos un grave problema”.
Antes, en un comunicado, la RFEF animó a la Comisión Antiviolencia y al Comité de Competición (los órganos con competencias sancionadoras) a decretar “cierres de tribunas cada vez que esto suceda y de estadios cuando sea por reincidencia”. Rubiales también pidió a los clubes que “si hay sanción, que el propio club tiene que asumir, que no lo dilate” para ayudar a combatir el problema.
Tras estas declaraciones, el Real Madrid respondió a través de un comunicado para acusar a la RFEF de no haber tomado ninguna medida en todo este tiempo, pese a las evidentes y reiteradas señales de alarma que desde nuestro club hemos venido denunciando”.
Por ello, el club insta a la RFEF a actuar “con contundencia y de manera inmediata para combatir estas lacras que son el racismo, la xenofobia y el odio”.
El domingo, Vinicius, a menudo criticado por enfrentarse con aficionados y jugadores rivales, se quejó de haber sido llamado “mono” en la derrota 1-0 contra el Valencia.
“No era la primera vez, ni la segunda, ni la tercera. El racismo es normal en LaLiga. La competición piensa que es normal, lo mismo la Federación y los rivales lo alientan”, afirmó el jugador brasileño en sus redes sociales.