Una de las comunidades argentinas más numerosas fuera del territorio nacional, la de Miami, celebró la semana de mayo con diversas actividades organizadas principalmente por la cámara de comercio argentino americana de Florida, con apoyo del consulado del país.
De los eventos consagrados a la fecha patria, se destacan el cóctel del 24 de mayo que tuvo lugar en la galería de arte de Daniel Maman y la gala anual, Te quiero tanto Argentina, que se llevó adelante en el hotel JW Marriot Marquis, el 25 de mayo a partir de las 19.
“Reconocernos en valores compartidos” fue una de las frases que más utilizó el cónsul Leandro Fernández Suárez en sus alocuciones, tanto el 24 como el 25, al referirse a la forma en que la comunidad argentina disfruta especialmente estas fechas, y la impronta que el consulado, de la mano de Juliana Hecker -responsable de la promoción cultural- le dio a la gestión que culmina este año.
En charla con Ámbito, y respecto de cómo se experimentan estos eventos teniendo en perspectiva la realidad nacional, Fernández Suárez destacó: “Es el último festejo de Mayo que voy a vivir como Cónsul acá en Miami (…) me voy con la sensación del deber cumplido, contento, y viendo una comunidad argentina pujante. Tomando ese ejemplo, si nos involucramos todos, sin individualidades, no sólo vemos que tenemos más cosas por las que estar orgullosos, sino que queda claro que es posible hacer las cosas mejor. Por el país tenemos que trabajar todos juntos”.
En sintonía con las palabras de Fernández Suárez, Roberto Macho, presidente de la Cámara de comercio argentino americana también vivió el cóctel previo al 25 con sensaciones diversas: por un lado cantar el himno interpretado en vivo por una cantante y un pianista, con mucha más euforia que como suele ocurrir en territorio propio; a su vez, entregarle de sus propias manos una placa de reconocimiento al Cónsul que este año termina su gestión, pandemia de por medio; pero, además, como líder de la organización que reúne al empresariado nacional en el Estado de Florida, no poder darle la espalda a una situación Argentina signada por la premura electoral, una inflación que no encuentra freno y los condimentos que ya conocemos.
Momentos antes del inicio de la Gala, Macho dialogó con Ámbito:
Periodista: Miami es hoy un hub tecnológico fundamental como horizonte para toda América Latina, y la llegada de startups argentinas es cada vez mayor. ¿Qué rol tiene la Cámara en este movimiento?
Roberto Macho: Bueno, por empezar nosotros abrimos este año el Comité de Innovación y Tecnología, viendo exactamente esto que mencionás. Incluso desde antes de tener un rol jerárquico en esta organización yo vengo dedicándome a las startups, en cuanto a cómo estructurarse e insertarse en Estados Unidos, y en la medida en que Miami crece como centro de tecnología, le damos mayor importancia a esto. De hecho, hace una semana y media nos reunimos con empresas de Washington que están planeando mudar sus oficinas a Miami, y comenzamos a cooperar con ellas en ese proceso. También ayudamos a las empresas argentinas que de pronto están en etapas iniciales pero piensan en prestar servicios desde allá para acá, considerando que el rubro lo permite y es beneficioso por el tipo de cambio.
Periodista: ¿Hay algún programa específico para emprendimientos tecnológicos early stage?
R. M.: Sí. Generalmente trabajamos en esto con el Consulado y Cancillería. Cuando tomamos contacto con startups muy jóvenes, les damos una mano en la relación con capitales de inversión americanos que buscan ese nicho, de proyectos con gran talento humano y buenas ideas, pero que son de alto riesgo aunque también es cierto que necesitan menos dinero. Hoy día, como decía, Cancillería está poniendo a punto un conjunto de empresas que quieren desembarcar en Miami, y nosotros también aprovechamos eMerge Américas -N de R: uno de los eventos de tecnología más grandes del mundo, que se realiza cada año en abril en Miami- como espacio de networking. O sea, desarrollamos acciones específicas con empresas argentinas y también, con el Consulado, nos sumamos a eMerge.
P.: ¿Y cómo se vincula ese empuje, todo ese movimiento de nuevas empresas con jóvenes argentinos que quieren crecer, con la coyuntura local, a la que no se puede ser indiferente?
R. M.: A ver, es innegable que Argentina está en una situación complicada, pero por otro lado, hace rato que esto es así. Entonces desde la Cámara, que es una organización sin fines de lucro, hacemos todo el esfuerzo por promover negocios entre Argentina y Estados Unidos para que nuestro país esté mejor. A su vez, los argentinos tenemos un doctorado en cómo pelear crisis -se ríe- y eso se nota cuando llegamos a mercados más seguros, con crecimiento sostenido, como el de Miami. De hecho, incluso se ve la diferencia respecto de otros países de Latinoamérica.
P.: ¿El trabajo a distancia puede ser una salida a la crisis?
R. M.: Bueno, sin dudas es muy rentable, y Argentina tiene talento para hacerlo. Cuando uno tiene una empresa, no le queda otra que trabajar con lo que hay: si la situación es crítica, okey, a ver cómo hacemos en este contexto para que la compañía siga creciendo y expandiéndose. Ahí la Cámara es un aliado. Y acá quiero agregar que cada uno también tiene que comprometerse un poco. Es decir, yo estoy convencido de que solamente tenemos derecho a quejarnos de Argentina si hacemos algo para que el país esté mejor.
Poco después de las 8, los 260 invitados ingresaron al salón principal del hotel, en el piso 19, donde el espectáculo se adueñó de toda la escena.
Gael Martínez ingresó con la bandera de ceremonia, representando a la escuela Argentina en Miami, inaugurada recientemente. Entonces todo el mundo de pie cantó el himno nacional, y después el público escuchó, también, el de los Estados Unidos en la voz de Solange Merdinian.
Gabriel Mores, hijo del ilustre pianista, cantó tangos acompañado, en ocasiones, por Mariana Quinteros. Una pareja de baile hizo lo propio, y se reconoció como personalidad del año a Marcelo Young, CEO de Transnational foods.
Todo el servicio gastronómico estuvo a la altura de un evento internacional de categoría. Hubo tiempo para sorteos y, sobre el final, una banda de covers puso a todo el mundo a bailar a puro ritmo. Obviamente Muchachos (versión mundialista) fue el tema que despertó más euforia.
Elisa Weiner, Directora de la Cámara y organizadora, junto con el Secretario General Marcelo Bottini, sonreía satisfecha al final de la noche: “la verdad es que este evento fue muy emocionante no sólo por tratarse de una fecha tan importante para nuestro país, sino también porque lo aprovechamos como cierre de año teniendo en cuenta el calendario de los Estados Unidos. Entonces siempre es un momento en el que hacemos balance y por suerte todo el mundo pudo festejar y nos volvimos a encontrar entre argentinos”.
En pleno Brickell -uno de los barrios más caros del condado- alrededor de las 11 de la noche volvió el silencio. Con la bahía al lado, las puertas del JW Marriot Marquis retomaron la calma, pero en su imponente fachada se respiraba, todavía, un aire de triunfo (deportivo), pujanza y de camaradería.
¡Si acaso el viento pudiera llevar ese perfume lo más al sur posible!