Con un último recital de su estrella Nikola Jokic, los Denver Nuggets se proclamaron campeones de la NBA por primera vez, al vencer 94-89 a los Miami Heat y ganar las Finales por un global de 4-1.
Los Nuggets aprovecharon así la primera de las tres oportunidades que tenían para cerrar las Finales y celebraron a lo grande con su público el primer anillo en sus 47 años de historia.
Los Heat dominaron el arranque del partido de la mano de un imponente Bam Adebayo (20 puntos y 12 rebotes), pero acabaron sucumbiendo con errores clave de su estrella Jimmy Butler (21 tantos) en los dos minutos finales, en los que llegaron a ir por delante en el marcador.
Nikola Jokic fue elegido el Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales, después de firmar otra soberbia actuación con 28 puntos y 16 rebotes.
"Hemos ganado juntos. Es una sensación extraordinaria", declaró el serbio restando importancia a su descomunal actuación en su estreno en unas Finales, en las que promedió 30,2 puntos, 14 rebotes y 7,2 asistencias.
"El trabajo está hecho y podemos volver a casa", afirmó el genio de Sombor después de brindarle a Serbia una segunda jornada seguida de alegrías tras la histórica victoria de Novak Djokovic en Roland Garros.
Jokic, que ya tenía dos premios MVP de temporada (2021 y 2022), se ha consolidado como la superestrella del momento en la NBA con unos playoffs históricos.
El pivote, de 28 años, es el primer jugador que logra las mayores marcas en puntos (600), rebotes (269) y asistencias (190) de unos playoffs de NBA.
El MVP más improbable - nunca un ganador de este premio fue elegido en un puesto tan bajo del Draft (41) - acabó siendo el líder del primer anillo de la historia de Denver, una franquicia cuyos mejores resultados eran cuatro derrotas en las finales de la Conferencia Oeste.
En tiempos de prisas y exigencias en la NBA, este triunfo es una recompensa a la paciencia del propietario de la franquicia, Stan Kroenke, que también posee títulos de campeón de la liga de football americano (NFL) con Los Angeles Rams y de la de hockey sobre hielo (NHL) con los Colorado Avalanche.
La dirección de Nuggets permitió que el equipo se cociera a fuego lento durante casi una década en torno al talento único de Jokic y la fabulosa conexión que tiene con Jamal Murray (14 puntos).
Para Murray, este anillo es el premio soñado a su espíritu de superación. El base canadiense se perdió toda la pasada temporada por una grave lesión de rodilla pero en los playoffs ha brillado al punto de ser el cuarto jugador en promediar al menos 20 puntos y 10 asistencias en unas Finales, emulando a los gigantes Magic Johnson, Michael Jordan y LeBron James.
Acabado el partido, con los 19.000 aficionados del Ball Arena rugiendo de alegría, el técnico Michael Malone lanzó un ambicioso aviso para la liga.
"Tengo noticias para ustedes, no estamos satisfechos con uno. Queremos más", clamó. "El último paso después de un campeón es ser una dinastía".
Del lado de Miami, sus líderes reconocieron la superioridad de los campeones. Jimmy Butler, el eterno perseguidor del anillo, aseguró que no dejará de intentarlo con los Heat, con los que ya perdió las Finales de 2020 ante los Lakers.
"He tenido unos compañeros de equipo increíbles que han competido conmigo y nos han dado la oportunidad de ganar un campeonato, algo que sigo creyendo, con todo lo que llevo dentro, que conseguiremos como organización y como ciudad en Miami" recalcó el veterano escolta.
Denver "ha sido un gran equipo ante el que no hemos podido encontrar las soluciones suficientes para superar la eliminatoria", reconoció de su lado Erik Spoelstra, el reputado entrenador de Miami.