La campaña electoral llegó a los eventos empresarios. Es que, luego de la definición de las candidaturas, este martes se realizó en La Rural la convención anual de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), que nucleó a los principales empresarios del Grupo de los Seis. Como cada año, estuvo invitado el ministro de Economía, con la novedad de que este año coincidió con que Sergio Massa será también el candidato principal para presidente del peronismo.
El clima del empresariado de la construcción es el de la “contradicción”. Así se reflejó en el duro discurso inicial del presidente de Camarco, Gustavo Weiss, que, si bien destacó el récord histórico en algunos indicadores, como el consumo de cemento, aseguró que la “inflación descontrolada” ya muestra signos de paralización de obras.
Al lado de Weiss en el escenario, y frente a un auditorio llenó, habló como todos los años Gerardo Martínez, secretario general de la Unión Obrera de la Construcción (Uocra), quien matizó los datos de Weiss. Mencionó que la construcción casi duplicó la cantidad de trabajadores durante los últimos cuatro años, al pasar de 250.000 a 470.000. Ahí recibió el único aplauso que se realizó durante el discurso de apertura, por parte por los empresarios presentes. Al finalizar su discurso, Martínez llamó a los presentes a votar a Massa.
“Más de uno de los que estaban sentados lo va a votar, porque es un peronista pro empresa. Si era un kirchnerista creo que no lo votaba nadie”, afirmó un importante empresario de la construcción. En la cámara no molestó el comentario de Martínez. “Sabemos que la CGT es pro-Massa”, agregó.
Es que al finalizar su discurso, Martínez afirmó: “La estamos pasando mal, pero tenemos esperanza. Este año vamos a elegir presidente, y con respeto lo digo, pero hay que destacar que hay un ministro que con responsabilidad asumió en una situación crítica y ahora redobla la apuesta para decir que quiere ser presidente. Creemos que es una alternativa válida, ustedes saben quién es, lo conocen, saben que tiene sustentabilidad en el criterio".
En diálogo con medios, Weiss también fue consultado sobre Massa: “La cámara es apolítica, pero lo que puedo decir de Massa es que agrega previsibilidad a la situación actual, lo conocemos desde Tigre, entiende lo que es la inversión, la empresa privada, y lo que es estar conectado con el mundo". Además, agregó: “Coincidimos con Massa, y también con lo que dice Horacio Rodríguez Larreta, que tiene un discurso similar, ambos hablan de ampliar y de los consensos, y eso es lo que se necesita para poder generar los cambios que hacen falta”.
En su discurso de apertura, Weiss fue muy crítico con la actual situación. Si bien aseguró que la obra pública permitió “amortiguar” los efectos de la “retracción en la actividad inmobiliaria”, advirtió: “Ya hay evidencias preocupantes vinculadas al incumplimiento de los plazos de pago contractuales, y a las distorsiones en los regímenes de redeterminación de precios, que en épocas de alta inflación, no reflejan en tiempo y forma el verdadero aumento de los insumos”. De hecho, para este año, Weiss estimó que la inversión pública alcanzará el 1,4% del PBI este año, menor a lo que dice el presupuesto.
El Gobierno llevó una respuesta al evento. En uno de los paneles estuvo presente el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, quien anticipó que cambiarán el sistema de redeterminaciones, para que las empresas puedan “presentar liquidaciones parciales y cobrarlas, mientras continúan las obras hasta la terminación total”. Adelantó que las medidas estarán vigentes en 60 días para “agilizar los procedimientos, redeterminaciones y los pagos a contratistas.
“Impulsamos un DNU que va a modificar el 691, no va a resolver el problema de la noche a la mañana, pero sí agilizar y cumplir con mucho de lo que nos están pidiendo. Está a la pronta firma de Presidente”, afirmó en el escenario. “¡Qué noticia bomba!”, manifestó a su lado León Zakalik, secretario de Camarco, quien moderaba ese panel.
Por otro lado, Weiss aprovechó el escenario para lanzar una fuerte advertencia durante en el discurso de apertura: "Tememos una colisión, una parada repentina y abrupta, que deje una nueva y grave herida en la sociedad y en el aparato productivo". En diálogo con medios, fue consultado sobre si prevé una devaluación: aseguró que la ve como "inevitable", pero pidió que se haga en el marco de un plan económico. Según su mirada, Massa intentará terminar el Gobierno sin devaluar. "Pero no importa después quién asuma, todos van a tener un plan de estabilización parecido, va a perjudicar al sector, pero también sabemos que la economía hay que arreglarla".
Sobre el final de la convención, minutos antes de la llegada de Massa, llegaron al evento de la Camarco otros de los dirigentes del Grupo de los 6, como Mario Grinmann (Cámara de Comercio), Daniel Funes de Rioja, (UIA) y Adelmo Gabbi (Bolsa de Comercio). En diálogo con medios, Gabbi aseguró que las ganancias del mercado no se explican solo por Massa, sino por un “menú de candidatos que traen tranquilidad”. Hacia adelante, no le sorprendería que sigan las alzas, porque “el mercado está barato, y hay intereses internacionales que ven un país para invertir”. “Ninguno va a llevar al país por la banquina, sino por la ruta”, aseguró Gabbi, aunque todo estará atado a lo que se negocie con el FMI.
Por su parte, Grinmann contó que se enteró de la noticia de Massa cuando estaba de viaje en otro país. Sobre cuál fue su reacción, contestó: "Fue genial, me gustan Massa, Larreta y Bullrich, son moderados y proempresa”. Reveló que a pesar de que le mandó un mensaje a Massa para felicitarlo siendo las 3 de la mañana (producto de la diferencia horaria), el ministro le contestó rápidamente agradeciéndole. “Es una persona que dialoga permanentemente con nosotros”, agregó.
