El empresario Horst Paulmann Kemna, el tercer hombre más millonario de Chile y 691 en la lista de Forbes a nivel mundial, falleció hoy a los 89 años. Nacido en Kassel, Alemania, el 22 de marzo de 1935, fue el fundador del grupo Cencosud, dueño de los supermercados Jumbo, entre varios otros negocios repartidos por Sudamérica y Estados Unidos.
“Con profundo pesar queremos compartir con ustedes que nuestro querido Opa/Vati/ Horst ha partido hoy en Alemania a los 89 años. Afortunadamente, su despedida fue tranquila, en paz, mientras dormía. Nos queda el consuelo de saber que descansó sin sufrimiento, pero su ausencia deja un gran vacío en nuestros corazones”, dijo la familia en un comunicado.
“Su visión y liderazgo deja una huella imborrable en el país y en miles de colaboradores, destacando su pasión y dedicación por entregar un servicio de excelencia y calidad hacia los clientes y la generación de empleos, transformando la industria de supermercados, centros comerciales y retail en Latinoamérica”, señalaron desde la empresa.
El empresario tuvo cuatro hijos. Los tres primeros, Manfred, Peter y Heike, con Helga Koepfer.? El cuarto es Hans Dieter, nacido en 2018 de su pareja Katherine Bischof.
Horst Paulmann y su familia, compuesta por sus padres y siete hermanos, huyeron de Alemania tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, cruzando los Alpes con dirección a Italia en 1946, desde donde continuaron a Argentina y luego a Chile en 1950.?
Según sus propias palabras, a los 13 años, Horst trabajó como telefonista en Buenos Aires y luego fabricando juguetes. “En Alemania, después de la guerra, íbamos al colegio con nieve y descalzos. Y eso enseña. Cuando llegábamos después de almuerzo y revisábamos los tarros de la basura de los americanos, del regimiento, a veces encontrábamos una punta de plátano, de banana, y lo comíamos”, dijo en una entrevista..
Junto a su familia, se instaló en Temuco, donde el padre consiguió un puesto como concesionario del Club Alemán y del Club de La Unión.
En 1952, la familia compró un restaurante local llamado Las Brisas, que luego transformaron en supermercado, que fue el origen de la fortuna familiar.
Tras la muerte de su padre, Horst y su hermano Jürgen Paulmann levantaron una serie de cadenas de supermercados, comenzando por el primer hipermercado en la Av. Kennedy.
Luego, dividieron agua: Jürgen (fallecido en 2014) se quedó con los supermercados Las Brisas de regiones y Horst con el proyecto del hipetmercado Jumbo, como el elefante. "Porque pisa fuerte. Es un animal con mucha resistencia, muy inteligente", ha dicho el empresario.
Ese fue el inicio de Cencosud, que siempre ha tenido el foco en los supermercados. Si bien sumó nuevos países -partió en Chile y siguió en Argentina, Perú, Colombia, Brasil y Estados Unidos- e ingresó a nuevos negocios (centros comerciales, tiendas de mejoramiento del hogar y multitiendas), Paulmann siempre ha apostado por la venta de alimentos y artículos de higiene, negocio que representa más del 70% de los ingresos del holding.
“Supermercados es nuestro negocio, somos gente de alimentos, lo tenemos en el alma”, dijo Paulmann tras ganar el premio al ‘mejor empresario’ en 2012. “Si hay crisis, la gente no compra auto, ni TV, ni zapatos, pero sí comida todos los días. Así que supermercados es lo mejor que hay en el mundo, porque entra platita todos los días, es lo más sano”, añadió.
En la pandemia, las clasificadoras le dieron la razón al empresario chileno-alemán. ”El fuerte de la compañía se encuentra en el segmento de supermercado, que no debería verse afectado por las condiciones actuales, permitiéndole mitigar, en parte, los efectos de la coyuntura”, dijo Feller Rate.
Durante muchos años, la residencia de Horst Paulmann en Chile fue una de las exclusivas suites del hotel Hyatt de Avenida Kennedy, hoy Mandarín Oriental. El empresario se había establecido en Argentina, y cada vez que cruzaba la cordillera, que a principios de siglo fue de manera periódica, llegaba a su habitación de súper lujo en el sector oriente de Santiago.
Tenía de todo y lo que no, se lo buscaban. La mansión que se había construido en la zona de Quinchamalí –con una pileta decorada con un elefante- la había dejado de utilizar tras su separación de Helga Koepfer.
Fue tan buen cliente del Hyatt que un día el gerente del hotel convocó a un grupo de empleados y se dirigieron a la habitación del empresario. Todos formados, tocan la puerta, lo invitan a salir, y destapan una placa con el nuevo nombre de esa habitación: "Usted ha sido el mejor cliente de este hotel, por lo que hemos decidido que de ahora en adelante esta habitación se va a llamar Suite Paulmann".
El empresario no estaba solo: justo estaba negociando una fusión, una historia completamente desconocida hasta ahora. ¿La contraparte? Ni más ni menos que Sodimac.
La idea era unir las cadenas para el mejoramiento del hogar y ferreterías Easy, del empresario de origen alemán, con su rival de la familia Del Río.
Por eso, el día en que se destapó la placa con el nuevo nombre de la suite, varios miembros del antiguo directorio de Sodimac estaban en la habitación del hotel con Paulmann y conocieron de primera fuente su determinación y carácter.
Recuerda uno de los presentes aquella ocasión: las más exclusivas habitaciones del Hyatt (no más de media docena) tenían nombres de los principales compositores de música clásica de la historia. Y Paulmann encontró que ponerle su nombre a una de ellas era lo más ridículo que se le podría haber ocurrido al gerente del hotel.
“Lo queda mirando y le dice: ‘usted es huevón, voy a ser el hazmerreír de todos’. Y le pidió que sacara inmediatamente la placa”, recuerda un alto directivo que estuvo en esa habitación del hotel aquel día. “El gerente intentaba sacar los tornillos, pero apenas podía con el temblor de sus brazos”, añade.
En las negociaciones con los dueños de Sodimac, que duraron varios meses y estuvieron a punto de materializarse, el empresario nacido en Kassel mantuvo inalterable su postura sobre la valorización de su empresa, que según su contraparte era muy superior a la estimación que habían hecho ellos. Y como no estuvo de acuerdo en los precios, desechó fusionarse con su rival.
A los pocos meses de esta fallida negociación, los Del Río anunciaron –en junio de 2003– un acuerdo para unir Sodimac con Falabella. Historia conocida: formaron el mayor conglomerado chileno de venta al detalle. Paulmann siguió su camino en solitario.
Tras dar por cerradas sus negociaciones con los Del Río, el dueño de Cencosud no se quedó de brazos cruzados. Inició un espiral de compras de empresas competidoras, entre ellas, la cadena de supermercados Santa Isabel en Chile, con lo cual comenzó a consolidar su presencia en este sector en el que era un importante actor con sus hipermercados Jumbo.
Entre medio, hace poco más de dos décadas, Horst Paulmann Kemna tuvo en sus manos una oferta de la gigante Walmart para comprar la cadena de supermercados Jumbo en Argentina. Lo pensó, analizó y tomó una decisión. Vender. Pero algo lo hizo cambiar de opinión y reculó.
Luego, llegó a la gerencia general Laurence Golborne, quien junto a su equipo fueron quienes le abrieron la puerta a Paulmann para realizar grandes adquisiciones con fórmulas alternativas al pago en efectivo, como el canje de acciones. Te compro la empresa y te doy algunos papeles de Cencosud, era la oferta. Así sumó la tienda por departamentos Paris.
Luego, la compañía se expandió por Argentina, puso su bandera en Perú, Colombia y Brasil, y potenció el negocio financiero.
En el camino, varios ejecutivos optaron por dar un paso al costado. El día a día con Paulmann no era fácil. Muchos gerentes terminaron destrozados y hasta hoy evitan hablar de Cencosud. Golborne estuvo ocho años en la compañía; salió en 2008. Tras él pasaron varios gerentes generales, algunos con un discreto desempeño y otros que lograron levantar un buque que a mediados de esta década sufrió varios episodios derivados, principalmente, por compras de empresas que no dieron los resultados esperados. Ahí figuran ejecutivos como Jaime Soler.
Tras un breve periodo de Andreas Gebhardt, a fines de 2019 asumió como CEO de la compañía el argentino Matías Videla, que salió por la puerta de atrás tras ser acusado de uso de información privilegiada.
Horst dejó el directorio del grupo Cencosud en abril de 2022 tras 45 años, por razones de salud.
La presidencia la tomó su hija Heike, pero renunció a fines del año pasado tras la crisis que se desató en la compañía luego que su exgerente general, Matías Videla, fuera sancionado por uso de información privilegiada.
En su reemplazo asumió Julio Moura, de nacionalidad brasileña, quien es miembro de la mesa del grupo desde 2011. El directivo fue ratificado en el cargo en la junta de accionistas de abril del año pasado.