Con las manos se comunica, gesticula su sentir y se expresa de la mejor manera que usted conoce; pero ellas por sí solas también hablan y revelan la edad que usted tiene. Uno de los principales problemas que expone la dermocosmiatra Gisel Salvador es la constante exposición al sol sin protección todos los días, lo que genera pigmentaciones y envejecimiento. Además, influyen factores como el estrés, el tabaco y la deshidratación.
El deterioro de la piel en ellas se debe a que están recubiertas por una capa muy fina que, a diferencia de otras zonas del cuerpo, carece de una gran cantidad de glándulas sebáceas, por lo que no retienen mucha agua. Su apariencia se ve mucho más perjudicada que la piel de la cara y el cuello, que también pueden sufrir un envejecimiento precoz.
La especialista compartió con SEMANA algunos trucos que es posible aplicar en casa, además de tratamientos en cabina eficaces para mantener rejuvenecidas las manos.