A partir de 2005, cada 17 de mayo se lleva a cabo una jornada global con el objetivo de aumentar la visibilidad de la discriminación y violencia sufrida por las personas que se identifican como lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTIQ+). Asimismo se busca fomentar medidas para proteger y poner fin a los actos y expresiones de odio que aún persisten hacia esta comunidad.

Cabe resaltar que el 17 de mayo de 1990, la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud (OMS) excluyó la homosexualidad de la lista de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE), con un consenso generalizado de que la homosexualidad es una variante natural de la sexualidad humana.

Según un trabajo de sistematización de las denuncias recibidas por discriminación en el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) entre los años 2008 y 2019 se recolectaron los siguientes números:

En cuanto a los ámbitos donde ocurren actos discriminatorios, los principales referidos fueron:

La homofobia es un temor, un odio o una aversión irracional hacia las personas lesbianas, gais o bisexuales. Asimismo, según la Real Academia Española (RAE) es una aversión hacia los homosexuales, tanto masculinos como femeninos.

La bifobia es un miedo, un odio o una aversión irracional hacia las personas bisexuales. Del mismo modo La Fundación del Español Urgente (Fundeu) se trada de una aversión a la sexualidad o a las personas bisexuales, a quienes lo parecen o defienden.

En la misma línea, la transfobia es un temor, un odio o una aversión irracional hacia las personas transgénero. En ese sentido, la Fundeu la define de la siguiente manera: "aversión a las realidades trans o a las personas trans (transexuales, transgéneros, travestis), a quienes lo parecen o las defienden".

Según el Ministerio de Salud, todas las personas que habitan el territorio argentino tienen los mismos derechos: