Los Angels de Los Ángeles vencieron 25-1 con una contundencia arrolladora a los Rockies de Denver en una exhibición entre la tercera y la cuarta entrada en las que anotaron respectivamente trece y ocho carreras, lo que los convirtió en los grandes protagonistas de la jornada de las Grandes Ligas.

El festival se produjo sobre todo en la tercera entrada, cuando los Rockies recurrieron a tres pitchers y convirtieron tres jonrones para un total de 13 carreras.

Es la primera vez en tres años en que un equipo logra tres imparables con tres lanzadores consecutivos, eso sin contar que Los Ángeles empatan el récord anotador de la franquicia en una sola entrada, que ya lograron en 1978 y 1997.

Para los de Colorado fue una quimera poder sumar, logrando apenas una carrera gracias a un jonrón de Brenton Doyle en la octava entrada que no fue para nada fructífera. Griffin Canning lanzó durante seis innings sin conceder anotación y permitiendo únicamente cuatro impactos.