Se cerró -una decena de días después- el ciclo de una compulsa marcada por los cruces y la incertidumbre: el Tribunal Electoral de la Provincia de Córdoba dio a conocer pasadas las 14 de este miércoles el resultado del escrutinio definitivo de los comicios del 25 de junio, que ratificó el triunfo del peronista Martín Llaryora (Hacemos Unidos por Córdoba) sobre el candidato de Juntos por el Cambio, Luis Juez, y oficializó el score final: 45,19% vs. 41,85%, con una brecha de 3,33 puntos.

El tenso conteo provisorio, signado por las fallas técnicas en su último tramo y concluido a las 6.20 de lunes 26, había dado un 42,76% para el alcalde capitalino Llaryora y un 39,76% para Juez (3 puntos de diferencia exactos), con el 94,90% de las mesas escrutadas. La diferencia surgida en el recuento definitivo, que arrancó hace una semana, terminó siendo ahora incluso levemente superior.

"Resultó electo por mayoría Martín Llaryora, por 870.935 votos contra 806.541", dijeron desde el Tribunal Electoral.

El carácter reñido de la polarizada elección acrecentó por esas horas el impacto de los problemas que mostró el recuento provisorio, que se investigan, en el marco del debut del sistema Turing de carga y transmisión de datos electorales desde las escuelas. De hecho, a la 1 de aquel lunes Juez anunció, en medio de críticas, la decisión de esperar el conteo definitivo para validar el resultado e incluso, en la previa al inicio de ese procedimiento clave, agitó el reclamo de la apertura de urnas.

“Después del bochornoso proceso electoral que nos tocó vivir, transcurrido 10 días de la realización del comicio y con la confirmación de que Martín Llaryora es el gobernador electo, primero lo felicito y le deseo una buena gestión”, lanzó Juez poco antes de las 14.30 de este miércoles vía su cuenta en Twitter, tras oficializarse los resultados del escrutinio definitivo.

“Les agradezco a todos los cordobeses por habernos dado semejante responsabilidad de control y les reitero nuestro compromiso de campaña de trabajar por la postergada agenda social que los cordobeses nos reclamaron”, agregó.

El martes, el senador nacional había vuelto a dar señales sobre la victoria indiscutible de Llaryora. “Supongo que mañana (por este miércoles) le dirán al intendente que podrá festejar; una vez que tengamos los resultados, saludaremos como corresponde”, dijo a Cadena 3. Y enfatizó que “es una vergüenza que, después de 25 años de gobierno, no puedan organizar un proceso electoral transparente en Córdoba”, respecto de una logística en rigor en manos de la Justicia Electoral.

El intendente capitalino Llaryora, por su parte, insistió el martes en que “todo el mundo sabía que el resultado era irreversible”. Previamente, había advertido que Juez deberá pedir “disculpas” al pueblo cordobés por dilatar el reconocimiento de la derrota y disparar sospechas sobre el proceso electoral.

Según trascendió, el avance del escrutinio definitivo incluyó una fuerte discusión el pasado lunes en el seno del Superior Tribunal de Justicia.

Más allá de su victoria, a Llaryora le espera una gestión con poder recortado respecto del escenario que le dejará el saliente mandatario Juan Schiaretti, hoy en clave nacional con su precandidatura a presidente por Hacemos Por Nuestro País (este jueves y viernes presentará sus propuestas de campaña en CABA y Córdoba, junto a su compañero de dupla, Florencio Randazzo). De la mano de la buena elección desplegada por Juntos por el Cambio, el oficialismo perdió la mayoría en la unicameral Legislatura y habrá paridad en las discusiones parlamentarias, mientras que además tendrá un Tribunal de Cuentas con control opositor.

“Habiendo el Tribunal Electoral Provincial dado a conocer el escrutinio definitivo de los comicios provinciales reitero mis felicitaciones al gobernador electo Martín Llaryora y a la vicegobernadora electa Myrian Prunotto”, aseguró Schiaretti a través de su cuenta en Twitter y poco después de las 14.30.

Además felicitó a “a todo el pueblo de Córdoba, una vez más, por haber participado de esa jornada cívica, en que la democracia nos permite expresarnos libremente”.

“Celebramos que continúe el camino del progreso y la transformación de nuestra Córdoba con Martín y Myrian, dos dirigentes jóvenes, serios y con probada capacidad de gestión, demostrada en donde les tocó gobernar”, arengó.

En esa línea, subrayó que impulsaron “esa renovación también” en “todo el territorio provincial”. “Fue la mayor renovación de dirigentes de la historia democrática: 290 intendentes y 25 legisladores no tuvieron re-reelección, porque nadie se perpetúa en el poder en Córdoba”, destacó.

“Y pasa en nuestra Provincia porque aquí somos respetuosos de nuestra Constitución, de la división de poderes, de la libertad de prensa y de la diversidad de pensamiento; somos capaces de pensar distinto y trabajar juntos y eso es lo que hace que nuestra Córdoba pueda progresar ante los desafíos de los tiempos actuales”, concluyó.