Más allá de haber sido un futbolista con grandes dotes, el exjugador de Barcelona (2005) y ahora comentarista de ESPN, Juan Manuel Herbella, puede jactarse de conocer el Ecuador más que la mayoría de los ecuatorianos, con detalles y costumbres. Y eso que solo estuvo un año en nuestro país.

Herbella habla de Ecuador como si fuera candidato a la presidencia. Destaca todo: clima, su gente, cultura. Ahora el médico, profesor universitario y jefe de Medicina de las divisiones menores de Huracán y de la selección de vóley, solo tiene palabras de gratitud y añoranzas.

Hace ocho años fue la última vez que estuvo en suelo ecuatoriano con una delegación de vóley.

Que le digan doctor o Herbella le da igual. Es un viajero al 100 %; ningún jugador extranjero que haya estado un año en Ecuador conoce tan bien el país.

Resulta que en el 2005, año en el que le tocaba jugar con Barcelona fuera de casa (cada 15 días), el exdefensa tenía una costumbre que hoy confiesa: “me iba con el equipo y mandaba a mi esposa a que me dé el alcance en el carro que me dio el club”. Al otro día, que era libre, se dedicaba a conocer detalle a detalle las ciudades y luego regresaba a Guayaquil. Gracias a ello puede hablar con facilidad de Loja, Chordeleg, Riobamba, Puyo, Manta y muchas otras ciudades. De lo rico que comía en Canoa, de los baños de cajón de Baños del Tungurahua y otras tantas cosas más.

“Te metían en un cajón y te bañaban con agua caliente y luego helada, y salías como nuevo”, recuerda con una sonrisa.

Asegura que una de las cosas que más le apasiona es conocer pueblos y su gente. “Una vez me fui a comer al mercado de Cuenca, el mote pillo”, dice sacando pecho.

“Y cuando fui a Machala, todo el camino, desde antes de Naranjal, hay sembríos de bananas; es como un mar de plantas, eso nunca lo olvidaré, nunca había visto eso”, agrega.

La única provincia que no pudo conocer y de lo cual se lamenta es Esmeraldas, pues todos le hablaban de los encantos de la Provincia Verde.

En marzo de 2005, en un Clásico del Astillero, Herbella le hizo un gol a Emelec. El marcador fue 2-1 en el Capwell, la otra conquista fue de Jaime Iván Kaviedes.

Actualmente el médico ha trabajado en varias cosas dentro del fútbol y fuera de él, “pero jamás he dejado el ser docente (en una universidad), dice con orgullo y motivación.

Para finalizar, Herbella tiene una anécdota marcada con el Nine. Recuerda que una semana no había fútbol y Kaviedes lo invitó a conocer Quevedo. “Se subió en una camioneta enorme, pero el conductor tenía un armas”. Él dice que tuvo miedo, pero cuando preguntó por qué la llevaban, le respondieron: “es para cuidar al Nine”.