Se espera que el Banco Central de Brasil recorte las tasas de interés en noviembre, a pesar de que su restrictivo comunicado de política monetaria indicó que no hay margen para la relajación en un contexto de crecientes expectativas de inflación, mostró el lunes una encuesta bancaria.

Tras mantener el miércoles su tasa de interés de referencia en el 13,75%, la más alta en seis años, el banco central hizo hincapié en el aumento de las expectativas de inflación como motivo de preocupación y reiteró que no dudará en reanudar las subidas de tasas si la desinflación no sigue la senda esperada.

No obstante, la encuesta semanal Focus de más de 100 economistas privados, publicada por la entidad, sigue mostrando una previsión mediana de un recorte de 50 puntos básicos en noviembre, seguido de otro recorte de 50 puntos básicos en diciembre.

Este escenario, sin cambios desde principios de este mes, situaría la tasa de interés de referencia en el 12,75% a finales de este año.

En comparación con los datos anteriores a la decisión de política monetaria, la desviación típica sobre estas expectativas ha disminuido ligeramente, mostrando una menor varianza en las proyecciones relativas a este escenario. El banco central publicará el martes las actas de su última reunión.

Miembros del Gobierno y el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva, que han criticado al banco central por el posible estancamiento de la economía al mantener las tasas altas, han dicho que quieren que suavice la política monetaria para responder a la desaceleración económica, la contracción del crédito y las turbulencias bancarias en el extranjero.